No creo que haya mucha gente que, aún sin saber una
palabra del tema, no haya visto alguna vez este peculiar casco rematado por un
ostentoso pincho similar a la moharra de una lanza.
La icónica imagen del káiser Guillermo con su
fastuoso mostacho y tocado por un pickelhaube es todo un símbolo del espíritu
militar prusiano de la misma forma que la Estatua de la Libertad es un símbolo emblemático de la Ciudad de New York, y
hasta era especialmente puesto de relieve en las caricaturas con que los
aliados se mofaban de sus enemigos germanos durante la Gran Guerra.
káiser Guillermo |
Hay diversas teorías sobre la paternidad del
pickelhaube que, en cualquier caso, provenía de los antiguos cascos decaballería usados durante las guerras napoleónicas.
Casco usado por un oficial de la caballería Napoleónica |
Caballería Napoleónica |
La más extendida es la teoría que afirma que, curiosamente, el origen de este casco no era prusiano, sino ruso. Esta versión dice que el Rey de Prusia Federico Guillermo IV vio un prototipo de un ejemplar rematado por un vistoso pincho encima del escritorio del zar Nicolás I durante una visita oficial. Al prusiano le llamo mucho la atención este modelo, así que a su vuelta a casa puso en marcha su eficiente maquinaria militar para fusilarlo mientras que el ruso se tuvo que fastidiar al ver cómo le habían pisado la idea porque la industria rusa estaba a años luz de la alemana.
The Falkensteiner ride. Obra del pintor Moritz von Schwind |
Estos frescos, basados en "El Cantar de los Nibelungos",fueron ejecutados por encargo de la academia de Karlsruhe en 1839, tres años antes de la entrada en servicio del primer modelo provisto del pincho en cuestión.
Pickelhaube ruso. Como se ve, salvo por el pincho
se asemeja mucho al modelo prusiano
|
Sea como fuere, la cosa es que en octubre de 1842
fue adoptado un casco que sería el antecesor directo del pickelhaube que todos
conocemos. veremos en la foto de abajo el único ejemplar que se conserva del
primer prototipo desarrollado por la firma Wilhelm Jaeger en 1839, el cual
tenía la particularidad de tener una visera movible cuya finalidad era proteger
los ojos en función de la intensidad de la luz.
Primer protoripo del pickelhaube diseñado por la firma Wilhelm Jaeger |
El cubrenucas en forma de cola de langosta estaba formado por tres
láminas, y el barbuquejo era de cuero forrado por pequeñas escamas de metal. A cada lado,
bajo el rosetón del barbuquejo, el casco estaba decorado con una escarapela con
los colores de Prusia, y en el frontal lucía una ostentosa águila de bronce
que, posteriormente, se trocó por el pájaro emblemático de cada estado alemán a
medida que lo iban adoptando. El conjunto estaba rematado por un enorme pincho
que le daba la característica silueta que distinguió a estos cascos durante más
de 70 años.
Así pues, el 23 de octubre de aquel año de 1842 se adoptó este casco
que, oficialmente, era un helm (casco en alemán), porque eso de pickelhaube
(literalmente, algo así como gorro con pincho) era un mote ideado por el
imaginario popular.
La prenda en cuestión, a la que solo se suprimió la movilidad de la
visera respecto al prototipo inicial, equipó inicialmente a varias unidades de
coraceros, concretamente los regimientos de línea del 1 al 5, el 7 y el 8. Los
cascos estaban fabricados de chapa de acero y la decoración de bronce, mientras
que los del 6º regimiento y dos regimientos de la Guardia estaban hechos de una
aleación de cobre y zinc que imitaba el oro con la decoración de plata alemana,
o sea, lo que se conoce como alpaca.
A raíz de la adopción de este tipo de casco, los demás estados
alemanes lo fueron adoptando en los años siguientes, siendo el segundo de ellos
Oldenburgo, en 1843, y el último Baviera, que se resistió heroicamente a
sucumbir a la moda prusiana hasta 1886, cuando murió el Rey Luis II y el
príncipe regente Leopoldo se hizo cargo del gobierno. Curiosamente, el regente
se negó a usar ese modelo de casco hasta que lo declaró reglamentario para los
generales en 1902. Sin embargo, obligaba a sus ayudantes a usar otros tipos de
prendas de cabeza antes que el pickelhaube.
Pero no solo se destinó el nuevo modelo a las unidades caballería, sino
también a las de infantería y artillería si bien estas últimas llevaban el
pincho rematado por una bola en vez de ser puntiagudos.
pickelhaube con pincho rematado por una bola |
En este caso se trataba de una pieza de 37 cm. de alto fabricada con
cuero hervido, siendo el emblema frontal de bronce, así como la espina que
recorría la parte trasera tapando la costura que unía el cuero y, por supuesto,
el pincho de 14 cm. de largo que estaba unido al casco mediante un soporte
cruciforme remachado al mismo. En la parte inferior del mismo se abrían dos
respiraderos, uno en cada lado, que permitía el paso de aire al interior de la
guarnición.
La parte frontal había una
insignia de metal que presentaba el escudo del Estado del que provenía el
casco. A cada lado del casco iba una insignia, la de la derecha era la nacional
e incluía los tres colores de la bandera del Imperio Alemán (negro, blanco y
rojo), la de la izquierda mostraba los colores de la provincia a la que
pertenecía el soldado.
Casco con los colores de la bandera del imperio Alemán |
En 1856 se llevó a cabo la primera modificación de este casco, siendo recortada la altura tanto del casco en sí, haciéndolo más redondeado, como el pincho. Así mismo, se acortó la longitud de la visera y se modificó el barbuquejo, sustituyendo las chapas curvadas que se ven en el de la foto por otras planas. Los cascos de infantería fueron recortados y vueltos a coser, por lo que se ahorraron el pastizal que les habría costado fabricar cascos nuevos para todas las testas germánicas destinadas a portarlos.
Casco de 1856 |
Además se volvió a reducir la longitud de la visera, y el cubrenucas pasó a ser una pequeña pieza casi del mismo tamaño que la delantera.
Así mismo, para ahorrar costos, las unidades en servicio fueron
nuevamente recortadas y recosidas, por lo que debían tener más costuras que un
calcetín remendado. Solo conservaron del modelo anterior la gran base
cruciforme para el pincho, que también fue ostensiblemente reducido en su
longitud. En cuanto a la escarapela de los laterales, permanecieron
iguales.
Casco de 1866 |
Para ello, se eliminó la espina de bronce que, como dijimos
anteriormente, estaba destinada a cubrir la costura trasera que cerraba el
casco. A fin de no dejar dicha costura a la vista se desmontaron el cubrenucas
y la visera y se giró el casquete de forma que quedase delante, siendo tapada
con el emblema.
Para fijarlo se eliminaron los tornillos que usaban desde siempre y se sustituyeron por dos pasadores que, la verdad, no proporcionaban ni de lejos la sólida unión de los tornillos. También se eliminó el soporte cruciforme para el pincho y en su lugar se puso una base circular, lo que permitía ahorrar grandes cantidades de bronce, material bastante caro por cierto, además de la mano de obra necesaria para colocar tanta virguería.
Para fijarlo se eliminaron los tornillos que usaban desde siempre y se sustituyeron por dos pasadores que, la verdad, no proporcionaban ni de lejos la sólida unión de los tornillos. También se eliminó el soporte cruciforme para el pincho y en su lugar se puso una base circular, lo que permitía ahorrar grandes cantidades de bronce, material bastante caro por cierto, además de la mano de obra necesaria para colocar tanta virguería.
Pero estas modificaciones resultó un fiasco porque el emblema frontal se
perdía constantemente y, además, la falta de refuerzo en la costura debilitaba
demasiado el casco.
Por lo tanto, tuvieron que reformarlo
de nuevo y reponer los tornillos que sujetaban el emblema, así como la espina
trasera ya que hubo que volver a poner la costura mirando hacia atrás. En una
directiva fechada el 23 de noviembre de 1871 se tomaron en consideración esta
serie de fallos, dando lugar al modelo que vemos en la foto de la derecha.
Como podemos apreciar, la larga espina
trasera recorría el casco desde el pincho hasta el borde de la cubrenuca. Esta
pieza tenía en su parte interna unos tornillos soldados, los cuales eran
fijados por el interior con tuercas. En cuanto al emblema frontal, salta a la
vista que está mejor unido al casco gracias a los tornillos que sustituyeron a
los pasadores que fueron la causa de dejar sembrado de vistosos wappen todo el
camino desde Alemania hasta París.
En 1887 se volvió a modificar el casco, buscando siempre abaratar el costo de cada ejemplar. Como vemos en la foto de abajo, el tradicional barbuquejo de escamas pasó a la historia para ser sustituido por uno de cuero mondo y lirondo que, según podemos apreciar, se fijaba en cada lateral con una argolla y un gancho con la finalidad de poder desmontarlo y reemplazarlo por el de escamas en desfiles y demás saraos militares. Así mismo se suprimió el borde de metal de la visera, que se sustituyó por un simple repujado.
Casco de 1887 |
El pincho fue rebajado de altura una vez más, y se aumentó el número de respiraderos hasta los cinco orificios. En cuanto a la escarapela, solo permaneció la del lado izquierdo.
Como vemos, este ejemplar ya había perdido la ostentosa apariencia de antaño.
Simbolismo Heráldico del Águila Prusiana
Placa de 1887
El águila
heráldica, representa el símbolo de las más altas deidades, de la Fuerza, el
Valor y el Sol; al Dios Zeus de los griegos, a Júpiter de los romanos y entre
las tribus germánicas, a Odín. Las alas extendidas se entienden cómo la
protección que estas deidades, y sus valores intrínsecos, prestan a sus
portadores, al estado y al soberano.
La cabeza
coronada y la cruz sobre ella, representa la elección por Dios del soberano, y
la recompensa del cielo, de cumplir dignamente su misión. El Cetro
en su garra derecha, es un atributo real por excelencia, que representa la
Autoridad, el Orden y la Potencia.
Podía estar
rematada por el águila, o por la fruta del pino, símbolo de la vida eterna. En
su garra izquierda, el Orbe rematado por la Cruz de Cristo, representa al
Imperio defendido por el soberano, garante de los valores y virtudes del
cristianismo.
Sobre su pecho,
la cinta y el lema prusiano, conmemorativo de la guerra de liberación: “Mit
Gott für Köening und Vaterland” o “Con Dios, por el Rey y la Patria”, la divisa
de Federico Guillermo III, inserta en su famoso llamado contra los franceses,
de 1813.
A lo cual se
agrega el monograma del viejo rey Federico Guillermo I von
Hohenzollern: FR, por “Friedrich Rex”. El oro y la plata de estas
placas, simboliza los metales nobles, según el rango de los esmaltes
heráldicos, en dónde el oro simboliza la generosidad y altura de miras, y la plata,
la paz y sinceridad.
Placa de 1899
La placa de
1899, es una modificación del águila heráldica prusiana, de alas extendidas,
empleada por los Regimientos de la Guardia Prusiana (Garde-Regt. zu Fuß Nº 2, 3
y 4, y otros), en la cual un tipo de águila ha sido adaptada como cóndor,
mediante la adición de un cuello repujado sobrepuesto.
Porta la Corona
Naval, o Corona Navalis, distinción de origen romano, segundo en rango,
concedida a los capitanes y soldados que eran los primeros en abordar los
navíos contrarios, con espada en mano. Esta corona es un recurrente elemento
heráldico, ampliamente usado por la Marina Real Británica, Italia, Brasil,
Venezuela, y otros.
En 1905 se modificó el modelo
prusiano, proporcionándole una cubierta de fieltro que protegía la bóveda de
cuero hervido y que no tuvo especial difusión ya que su vida operativa fue
bastante breve.
Otras versiones
más modernas eran completamente de metal, y eran sobre todo utilizadas por los
temibles coraceros (jinetes que cargaban con el sable) y por otras
personalidades con cierta relevancia militar y política. Ejemplo de esto último
es el uso que Ottovon Bismarck le dio a ese casco,
sin olvidar que también en España el casco fue utilizado por el dictador Miguel Primo de Rivera y algunos de
los miembros del directorio militar.
Ottovon Bismarck |
Dictador Miguen Primo Rivera Fotografía tomada de http://revistadistopia.com/historia/historia-histeria/miguel-primo-rivera/ |
Los cascos para la infantería estaban hechos de cuero. Durante la
Primera Guerra Mundial las reservas quedaron agotadas y tuvieron que ser
importados desde algunos países latinoamericanos, como el caso de Argentina. Durante
esa misma contienda las autoridades alemanas recurrieron a algunos materiales
sucedáneos para fabricar más cascos, incluso se comenzaron a fabricar cascos de
acero.
Casco Prusiano en Acero |
Casco Prusiano en Papel Prensado |
Lamentablemente para los soldados alemanes las nuevas tácticas de guerra
desplegadas durante la contienda hicieron que el casco fuera muy ineficaz para
proteger a los soldados, por ejemplo de los disparos de los francotiradores.
Para evitar bajas los soldados cubrieron sus cascos con forros de tela para
hacerlos menos visibles y brillantes, pero aun así, dada la voracidad del
conflicto, pronto se dieron cuenta de que tampoco protegía a los combatientes
de la metralla y las balas.
Casco Prusiano con forro de tela |
Durante 1916 el pickelhaube fue sustituido por los
nuevos cascos de
acero Stahlhelm, que garantizaba la protección de la cabeza de los
soldados ante las esquirlas de metralla. El stahlhelm fue adoptado por las
tropas y relegó a un segundo plano al pickelhaube, que quedó para las
ceremonias. Al caer los Imperios Centrales ante los aliados en 1918 este casco
quedó definitivamente abolido, incluso para los agentes de policía.
Casco Stahlhelm |
Soldado aleman usando el casco Stahlhelm Imagen tomada de http://www.ordendebatalla.org/blog/2016/09/12/el-ultimo-stahlhelm/ |
En fin, ya vemos que la historia de este casco tiene mas relevancia de
lo que parece y su utilizacion se mantuvo por mucho tiempo más que otros muchos
modelos. Por otro lado, el hecho de que Prusia estuviese considerada en aquella
época como el principal referente en lo tocante a la moda militar, así como por
su presencia en muchos países sudamericanos como asesores militares, hizo que
el pickelhaube fuese adoptado por muchos países incluyendo a España, Inglaterra
e incluso los Estados Unidos.
Por otro lado, no solo el ejército alemán hizo uso de estos cascos, siendo también reglamentarios en unidades de policía. Un accesorio aparte era el trichter que se usaba para sustituir al pincho y colocar unas vistosas plumas o crines de colores. Con todo, como podemos imaginar, este accesorio solo lo empleaban determinadas unidades en sus uniformes de gala, así como las bandas de música.
Por otro lado, no solo el ejército alemán hizo uso de estos cascos, siendo también reglamentarios en unidades de policía. Un accesorio aparte era el trichter que se usaba para sustituir al pincho y colocar unas vistosas plumas o crines de colores. Con todo, como podemos imaginar, este accesorio solo lo empleaban determinadas unidades en sus uniformes de gala, así como las bandas de música.
Casco prusiano con trichter |
Aun a día de hoy hay países que equipan a algunas de sus unidades
con este tipo de cascos. Este es el ejemplo de las academias militares de
Chile, Ecuador, Venezuela, Colombia y Bolivia, además de ser utilizado por la
Guardia Presidencial de Colombia.
Uso del Cascos Prusianos en el Ejército Chileno.
Para ilustrar aun más esta historia del casco prusiano citaré un articulo denominado "Cascos para la Escuela Militar" que encontré en la pagina http://www.cascoscoleccion.com/chile/chiesmil.htm que narra el como los cascos
prusianos marcaron una constante germanización del ejército chileno y explican
la razón de la futura adopción de los sucesivos tipos de cascos a lo largo de
la primera mitad del siglo XX.
Guerra del Pacífico |
El ejército chileno se ha mantenido permanentemente
en guardia, prácticamente desde su creación, ante la reiterada amenaza creada por
sus vecinos, disconformes con las fronteras establecidas.
Fue al comienzo de la larga "Guerra del Pacífico", sangriento enfrentamiento fronterizo entre Chile, Perú y Bolivia, de 1879 a 1884, cuando los militares chilenos tuvieron casual acceso a los primeros cascos prusianos.
Fue al comienzo de la larga "Guerra del Pacífico", sangriento enfrentamiento fronterizo entre Chile, Perú y Bolivia, de 1879 a 1884, cuando los militares chilenos tuvieron casual acceso a los primeros cascos prusianos.
El regimiento, a la sazón acantonado en las
cercanías de la ciudad de Santiago, fue más tarde enviado a Antofagasta,
importante ciudad estratégica y fundación chilena, tomada a Bolivia, y en
la ruta de este Regimiento hacia Perú.
Pero, aun cuando los nuevos cascos se apreciaban
como un elemento de modernización, se desestimó su utilización en el frente,
cediéndolos al Regimiento Cívico de la ciudad en 1880. Pero dejando huella en
el ejército, que recuperará su utilización con posterioridad, en su carrera por
modernizar el equipamiento, pues la experiencia del largo conflicto influyó en
un radical cambio de los uniformes, que habían evolucionado hacia diseños mucho
más funcionales.
Tropas Chilenas del
batallón cívico movilizado “Chacabuco”, en el Cantón de San Bernardo en las
cercanías de Santiago, 1879. Llevan cascos “pickelhaube” requisados al Perú y
el chaquetón gris con capuchón desmontable (Fotografía Díaz y Spencer, Archivo
Sr. Roberto Arancibia Clavel).
Capitán Emil Korner |
La moda impuesta por Prusia, como potencia vencedora (siempre los vencedores marcarán las pautas de la moda militar internacional), y un cierto sentimiento anti-francés, como consecuencia de su actitud durante la pasada "Guerra del Pacífico", decidirán al ejército chileno a adoptar uniformes, técnicas y tácticas prusianas, desplazando en 1886 Comisiones Ministeriales y Delegaciones Militares a Austria para importar un estilo prusiano e inculcarlo en el nuevo ejército.
Punta de lanza de esta nueva
filosofía fueron las Escuelas Militares. Chile había sido el primer país americano
que estuvo decidido, desde el principio, en constituirse en una potencia
militar. En 1832 ya se prepararon las bases para la primera Academia Militar,
embrión de lo que luego sería la Escuela Militar.
Al recurrir a Alemania para organizar un plantel de profesores, consiguieron del Emperador el envío del capitán Emil Körner, agregado al Estado Mayor Alemán, que fue nombrado subdirector de la Escuela Militar. Pronto el resultado fue el reconocimiento internacional de la Escuela Militar como modelo en su género.
Al recurrir a Alemania para organizar un plantel de profesores, consiguieron del Emperador el envío del capitán Emil Körner, agregado al Estado Mayor Alemán, que fue nombrado subdirector de la Escuela Militar. Pronto el resultado fue el reconocimiento internacional de la Escuela Militar como modelo en su género.
Llegan los prusianos.
Jorge Boonen Rivera |
Fue bajo el mandato del Presidente Domingo Santa María cuando se inició el proceso de transformación que continuarían luego los Presidentes José Manuel Balmaceda y Jorge Montt Álvarez.
Presidente Domingo Santa María |
Pese a que la victoria militar generó un impulso "ideal" del alma chilena, y lanzó adelante la mitología del vencedor, la realidad de los cuerpos militares era muy otra. A contrario sensu, la misma guerra demostró las debilidades de las Fuerzas Armadas: desorganización, inoperancia, retraso técnico y material.
El propio Körner haría un análisis descarnado sobre la situación de las fuerzas armadas chilenas luego de la guerra.
En él se refiere ácidamente a la situación que cruzaba no sólo a la tropa sino también a los oficiales: “El Ejército, lejos de ser una mezcla de todas las clases de la sociedad, se componía de las personas que no tenían capacidad o vocación para otra ocupación... era corriente la bebida y el juego además del vicio de la "camaradería" -convivencia con mujeres sin mediar matrimonio.. y la corrupción habría sido total si no hubiesen existido castigos en la forma más brutal, con bastón -hasta 200 golpes- y grillos.”
En él se refiere ácidamente a la situación que cruzaba no sólo a la tropa sino también a los oficiales: “El Ejército, lejos de ser una mezcla de todas las clases de la sociedad, se componía de las personas que no tenían capacidad o vocación para otra ocupación... era corriente la bebida y el juego además del vicio de la "camaradería" -convivencia con mujeres sin mediar matrimonio.. y la corrupción habría sido total si no hubiesen existido castigos en la forma más brutal, con bastón -hasta 200 golpes- y grillos.”
La transformación de esta situación, a la que observó críticamente, fue la misión que se confió a Körner, quien iniciaría el proceso de profesionalización del Ejército de Chile. De esta experiencia se desprendieron importantes decisiones como la reorganización del Ejército, la formación de la Academia de Guerra, la reestructuración de la Escuela Militar y de la enseñanza de los oficiales, y la incorporación del Servicio Militar Obligatorio, en 1900.
Con la asistencia de sucesivas nuevas misiones prusianas y el apoyo de algunos oficiales chilenos que habían conocido la experiencia formativa del Ejército de Prusia, el alto oficial sería influencia capital para la fundación de la Academia de Guerra, con la cual daría paso a la metamorfosis del ejército.
Algunos aspectos de la influencia militar prusiana.
1. La
profesionalización de la formación de la oficialidad
Como es difícil
reseñar todos los aspectos en los cuales se manifestó la influencia prusiana,
tomaremos como referencia fundamentalmente el primer período, al que hemos
llamado la primera modernización del Ejército de Chile.
Este proceso se
dio en momentos de reflexión crítica de parte de la alta oficialidad. Los
problemas que había dejado al descubierto la campaña de la Guerra del Pacífico
no economizaban la situación de los oficiales, su poca formación y su
desorganización.
Estos fueron
algunos de los factores claves de la determinación de apoyar los aires
renovadores (¿será mejor decir, refundacionales?) que portaban Körner y
asociados. Al respecto, recordemos lo que señalan documentos oficiales del
Ejército de Chile.
“La creación de
un instituto de enseñanza superior para los oficiales del Ejército era una
sentida necesidad en la alta jefatura de la institución. La guerra había dejado
de manifiesto las deficiencias en los conocimientos militares modernos. La
guerra franco-prusiana había sido analizada por los oficiales de ambos países y
extraído consecuencias y lecciones que hicieron progresar la conducción
táctica. (...) Cursos de oficiales chilenos en Europa dieron a conocer los
adelantos de la época y permitieron evaluar el atraso de los conocimientos
militares. Por ello se dieron a la tarea de impulsar la reforma”.
Como
señalásemos anteriormente, el señor coronel Jorge Boonen Rivera jugó un
importante papel, dada su amistad con el capitán Emil Körner. Fue así
como fueron ellos los encargados de redactar el proyecto para "las
reformas que debían introducirse en el plan de estudios de la Escuela Militar y
en la organización de un establecimiento de instrucción superior técnica, en el
cual jóvenes tenientes y capitanes pudieran ir a completar sus conocimientos
técnicos y a prepararse para el profesorado en la Escuela Militar y para ser
los propagadores de la enseñanza de los reglamentos modernos en sus respectivas
Armas".
Dicho informe impulsaría al Presidente, don
Domingo Santa María, y su Ministro de Guerra, don Carlos Antúnez, a firmar el
decreto que dio nacimiento a la Academia de Guerra, al concluir el período
presidencial.
2. Modernización del reclutamiento
Otro ámbito de influencia trascendente sería la instauración del Servicio Militar Obligatorio, que terminaría con los procedimientos de enganche tradicionales, estableciendo una fórmula de reclutamiento que había sido instalada por el ejército alemán en la década de 1870, para asegurar la existencia de un ejército permanente, nutrido por “contingentes sacados de todos los estados que formaban el imperio, tanto durante los períodos de paz como en los de guerra”.
Esta medida fue considerada una de las reformas más importantes en la modernización del Ejército, y se ganó expresiones como “eficacísimo auxiliar del progreso social para nuestra población”, “la reforma de mayor trascendencia introducida en el progreso de la República en estos últimos años”.
Tobías Barros Merino |
Uno de los testimonios que ha mostrado esta percepción fue el de Tobías Barros Merino, quien viajó a Estrasburgo en 1895 para conocer de cerca la experiencia prusiana y quien, luego de su viaje, escribió La Vida Militar en Alemania , un notable libro donde expresa claramente su admiración por la organización militar prusiana.
“Las Repúblicas deberían estudiar este hecho (la alegría que manifiestan los jóvenes alemanes al ser reclutados) i talvez llegarian al convencimiento de que, léjos de ser atentatorio a la libertad el servicio obligatorio, es netamente nivelador i democrático.
El deber de defender la patria es uno para todos los ciudadanos, luego todos están obligados a aprender el modo de cumplirlo. ¿Por qué dejar, como entre nosotros, la defensa de las fortunas en manos de los que nada tienen que perder? ¿I por qué formar esa clase privilejiada, que se llama el Señorito, que compra con un puñado de monedas (que ni siquiera son el fruto de su trabajo sino el privilejio de la herencia) la vida de sus conciudadanos? ¿No seria mejor que poderosos i humildes se unieran bajo las sagradas banderas de la Nación, inspirados en un mismo ideal i cumpliendo iguales deberes? Al ménos así se conseguiria que el pueblo conociera a sus futuros mandatarios i éstos al lejislar desde el Congreso supieran sobre quienes lejislaban” .
Estos dichos se pueden comparar con algunas reflexiones del propio Emil Körner, para ver la coherencia entre la propuesta militar prusiana y su implementación en Chile.
“Los principios sobre que descansa la conducción de la guerra han experimentado una transformación completa merced á la institución de los ejércitos nacionales creados por el servicio obligatorio.
La guerra hoy ha dejado de ser un acto exclusivo de los gobiernos y de los ejércitos pagados con este objeto, pues de ella participan actualmente todas las fuerzas vivas y materiales de las naciones. Por consiguiente, la influencia que ejerce sobre la vida social y sobre el desarrollo de las naciones es mucho mayor ahora que antes, puesto que el ejército en pie de guerra quita á todos los ramos de la actividad humana, los elementos más vigorosos tomándolos en todas las clases sociales”.
El "Pickelhaube" y su implementación en 1900 en Chile.
Desde
1900, el "Pickelhaube" había sido adoptado por las escuelas militares
(Academia de Guerra, Escuela Militar, Escuela de
Suboficiales). Aunque hay datos de su utilización en esos centros ya en
1885.
Este video muestra una recopilación de imágenes editadas en las cuales se pueden observar a efectivos del Ejército del 1900 y uniformados de la desaparecida Policía Fiscal (integrada a Carabineros de Chile) en diferentes momentos de la historia chilena.
Su empleo se reglamentó, generalizándose su uso en
el ejército a partir de 1906, fecha de importantes reformas en las Fuerzas
Armadas Chilenas (Reglamento de Uniformidad de 1905, refundido el 6/2/1906).
Por su parte, el Escuadrón de Escolta Presidencia y la Escuela Militar habían
iniciado su uso ya en 1900.
Sería el 24 de marzo de 1919, cuando se fijó el
límite de uso del casco "Pickelhaube" en el Ejército Chileno a otros
cinco años, que posteriormente serían rebajados a tres. El Decreto del 24 de Marzo de 1919 también
establecía que, tras completarse la prórroga de uso del"Pickelhaube",
sería sustituido por un nuevo casco de corcho ( cucalón ) forrado con
el mismo tejido que el de los uniformes.
Cucalón de Corcho |
Su uso, no obstante, se prolongó un par de años en
provincias. Hoy sólo lo usan la Escuela Militar y la Escolta Presidencial. El
proceso de los cascos de Artillería con la esfera siguió el mismo proceso.
Se lució por última vez en Santiago en agosto de
1924, con motivo de la parada organizada en honor del príncipe Humberto de
Saboya, en el parque Cousiño ( actual Parque O´higgins, "Campo de
Marte" ).
Los Cadetes de Artillería desfilaban, hasta 1930,
con un casco similar, con una única característica diferenciadora consistente
en que su casco ostenta una esfera donde el resto de los cascos "de
punta" terminan en un remate cónico.
Para esta progresiva instauración del "Pickelhaube", se cursaron pedidos a Alemania, que los enviaba desprovistos de emblema frontal. Una reproducción del escudo nacional, fabricado en Chile, ocupó el espacio inicialmente destinado al águila imperial.
El escudo chileno incluye un huemul, un tipo de
ciervo que vive en los bosques andinos (Cervus, hoy en peligro de extinción) y
el cóndor (Sarcochamphus). Los colores blanco, azul y rojo aparecen en un
escudo central (el blanco representado en una estrella, en realidad de plata) y
en un penacho de plumas que lo corona. Son los colores que aparecen en su
bandera, que emula el diseño de la norteamericana, y que según su descripción
representan, el color blanco, las nieves andinas, el color azul, su cielo, y el
color rojo la sangre de los que murieron en la defensa de la patria. Pero
parece que los tres colores ya los utilizaban asiduamente los araucanos que,
según Alonso de Ercilla en "La Araucana" (el poema nacional chileno)
en el siglo XVI, que narra hechos anteriores al descubrimiento de su país por
parte de los españoles. Cuenta Ercilla que los araucanos no poseían ninguna
bandera pero que en las guerras utilizaban unas fajas tricolores, precisamente
con blanco, azul y rojo.
La "prusianización" del moderno ejército
chileno se prolongó hasta el inicio de la Primera Guerra Mundial. Aún en esas
fechas, la formación de los nuevo oficiales chilenos estuvo en manos de un
escogido equipo de instructores, principalmente austriacos, dirigido por el
capitán Emil Körner (llegó a ostentar el grado de General del Ejército Chileno).
Estos cuadros incluían, además de instructores austriacos,
profesionales de las diversas naciones del Imperio Alemán (sajones, como el
Capitán de Artillería Emil Körner, prusianos, como el Capitán Hans Edler Von
Kiesling, etc.). El resultado fue la consecución de un ejército disciplinado y
perfectamente capacitado.
El Ejército Chileno siempre ha despertado el interés
internacional y, ya desde 1891, ha sido considerado como el mejor organizado de
América de Sur.
Es interesante comprobar cómo, por sus particulares
méritos, ha recibido desde su nacimiento el reconocimiento de numerosos
profesionales.
General Baden Powel |
"He visto muchos ejércitos del mundo"-
decía ya el general inglés Baden Powel, vencedor de Mafeking (Guerra
anglo-boer, África del Sur, 1899/1900) y creador en 1908 de la institución de
los Boy-scouts y a de las Girl-guides - "He estudiado
los principales de Europa, y en ellos he observado los grandes progresos
modernos de nuestra profesión. El Ejército Chileno es igual a los mejores del
mundo por lo que toca a esos progresos, pero hay una pequeña diferencia: en
todas partes hallé soldados que habían sido enseñados a ser soldados, y en Chile
he visto al soldado natural, al hombre de pelea que ha nacido hombre de pelea.
Esto es lo que yo buscaba, lo que deseaba hallar, y esto es lo que da a una
nación hombres invencibles en la guerra."
Sus analistas han intentado comprender la razón de
las cualidades militares innatas en la juventud chilena ya que,
curiosamente, cuando en Chile fue instaurado el servicio militar
obligatorio en 1886 despertó el hecho tal entusiasmo en la población, que más
de 50.000 soldados desfilaron ante el palacio presidencial de La Moneda
y el Congreso aclamando a los autores de la ley. Luego se dirigieron a los
cuarteles que fueron literalmente asaltados con el fin de alistarse en el
ejército.
Situaciones semejantes se han producido siempre que
han existido rumores de conflictos fronterizos.
Independientemente del su acentuado fervor
patriótico, algo frecuente en países jóvenes y, aún, en naciones cargadas de
Historia, se recuerda que, a diferencia de los países europeas, el servicio
militar obligatorio era en Chile de tan sólo un año de servicio activo, pues
bastaban pocos meses para hacer del chileno un soldado sin igual. Para
explicarse esta cualidad se llegó a escribir que "La sangre de los
valerosos conquistadores castellanos, unida a la de los indomables araucanos,
ha producido ante todo un hombre de guerra en el que subsiste el atavismo de
cuatro siglos de nunca interrumpido batallar."
Por su parte, la Escuela Militar adaptó al águila
inicial, una especie de peto plateado, para simular el plumaje del cuello del
cóndor.
La Escuela Militar incorporaría al casco un
impresionante penacho de crines, para sus apariciones en paradas y desfiles,
como elemento de gala.
En la actualidad los cascos con airoso penachos
blancos son utilizados exclusivamente por los oficiales y cadetes de la
Academia Militar. La banda militar dispone de estos mismo cascos, pero su
penacho es de un color anaranjado cercano al rojo.
El casco del Director dela Escuela difiere esencialmente del resto al adornarse con una cascada de plumas blancas.
Los generales en traje de gala también portaron, con anterioridad estos mismos cascos.
El casco más impresionante perteneció al Escuadrón
de Caballería de la Guardia Presidencial.
Sobre el espectacular
casco de bronce que lucían estos jinetes, desplegaba sus alas un majestuoso
cóndor, completando una pieza de gran belleza, que lucirían hasta bien entrados
los años 30.
Finalmente, este escuadrón adoptaría el casco Mº 35
de origen alemán, tanto metálico como de fibra. Actualmente, en las paradas y ceremonias militares
en que participan los cadetes de la Escuela Militar, los altos penachos de
crines, realzan, si cabe, la espectacularidad de los actos.
Es importante decir, en breve, que la influencia prusiana importó para
la generación de un Ejército profesional, preparado en tiempos de paz para
enfrentar posibles situaciones de conflicto, presupuesto que se aproxima
estrechamente al concepto de ejército desarrollado en el proceso de formación
militar prusiana.
Todo ello hace al ascendiente que ejercieron las primeras misiones
militares prusianas en dos aspectos claves de la profesionalización del
Ejército: la formación de la oficialidad (con la creación de la Academia de
Guerra y reformulación de la Escuela Militar) y la instauración, en 1900, del
Servicio Militar Obligatorio, instituciones ellas que sellaron la impronta
característica del Ejército chileno del siglo XX.
En momentos que el debate sobre las perspectivas de desarrollo de las
Fuerzas Armadas, en este caso del Ejército, y de su profesionalización se abren
a nuevas propuestas, como la del oficial ocupacional (tesis de Janowitz), es
importante mirar con atención la cultura social del Ejército Chileno.
Al mirar a la modernización y profesionalización de la carrera militar
no se debe olvidar que sus antecedentes los encuentra en la Escuela Militar
Prusiana, y en ella se destacan factores sociológicos que le aproximan a la
propuesta del oficial profesional (institucional): con un alto sentido
corporativo, desarrollo acendrado de códigos militares formales y formativos y
una formación en destrezas profesionales. Ellas serían las necesarias
referencias en las que se encuentran los valores fundacionales de la actual
profesión militar."
Primeras escuelas militares en Colombia
Presidente Rafael Reyes Prieto |
La primera escuela militar que se organizó en Santa fé, bajo
el mando provisional del coronel español José Ramón de Leyva, no produjo lo
esperado.
En 1814 en Rionegro se fundó otra escuela militar bajo la dirección de Francisco José de Caldas, cerrada en 1815, con motivo de la reconquista española. En 1848 se fundó el Colegio Militar y cesó en 1851 a causa de la guerra civil de ese año.
En 1853 tomó la dirección el general Vicente Gutiérrez de Piñeres para interrumpirse en 1854 debido al golpe militar del general Melo.
En 1861, con Tomas Cipriano de Mosquera en la Presidencia, surgió la Escuela Civil y Militar bajo el mando del abogado Lorenzo Lleras, gasta su terminación en 1867 con la caída del general Cipriano de Mosquera.
En 1883 el presidente Rafael Núñez ordenó abrir nuevamente la escuela bajo el mando del general Sergio Camargo Pinzón, hasta 1885, año de una nueva guerra civil, con la cual finalizaron las actividades en la misma.
Coronel José Ramón Leyva |
En 1814 en Rionegro se fundó otra escuela militar bajo la dirección de Francisco José de Caldas, cerrada en 1815, con motivo de la reconquista española. En 1848 se fundó el Colegio Militar y cesó en 1851 a causa de la guerra civil de ese año.
Francisco José de Caldas Fotografía tomada de http://www.colarte.com/colarte/foto.asp?idfoto=99741 |
General Vicente Gutiérrez de Piñerez |
En 1853 tomó la dirección el general Vicente Gutiérrez de Piñeres para interrumpirse en 1854 debido al golpe militar del general Melo.
En 1861, con Tomas Cipriano de Mosquera en la Presidencia, surgió la Escuela Civil y Militar bajo el mando del abogado Lorenzo Lleras, gasta su terminación en 1867 con la caída del general Cipriano de Mosquera.
Presidente General Tomas Cipriano de Mosquera |
En 1883 el presidente Rafael Núñez ordenó abrir nuevamente la escuela bajo el mando del general Sergio Camargo Pinzón, hasta 1885, año de una nueva guerra civil, con la cual finalizaron las actividades en la misma.
Presidente Rafael Nuñez |
Las escuelas militares constituidas en 1848, 1861, 1883, 1881 y 1896
tuvieron todas una vida corta debido a un conjunto de factores:
inestabilidad en la vida política generada por las constantes guerras civiles locales y nacionales que afectaron el país, la competencia que ejercían sobre el Ejército central las diversas milicias de ambiciosos hacendados y terratenientes locales.
Por otra parte, también influía en este la debilidad del Gobierno Central en un país deficientemente integrado y, finalmente, la ideología antimilitarista de la élite política que obstruyó constantemente la consolidación de un ejército permanente de importancia y con autoridad.
inestabilidad en la vida política generada por las constantes guerras civiles locales y nacionales que afectaron el país, la competencia que ejercían sobre el Ejército central las diversas milicias de ambiciosos hacendados y terratenientes locales.
Por otra parte, también influía en este la debilidad del Gobierno Central en un país deficientemente integrado y, finalmente, la ideología antimilitarista de la élite política que obstruyó constantemente la consolidación de un ejército permanente de importancia y con autoridad.
De estas formas, en un estado aún precario, sin un mercado interno
desarrollado, con predominio del poder local y un centro político realmente
débil, la viabilidad de un Ejército Nacional era nula.
A pesar de las guerras y de la utilización partidista de las Fuerzas
Armadas a finales del siglo XIX, se hicieron esfuerzos por realizar la reforma
del Ejército.
En 1891 Carlos Holguín Mallarino, siendo presidente de la República, abrió brevemente la Academia Militar para la formación de oficiales, contratando al coronel norteamericano Enrique Lemly como director y al alemán Sophus Hoeg Warming como instructor de artillería.
El general Leonardo Canal González señaló la necesidad de formar oficiales científicos y relató el estado pobre en que se hallaba la escuela militar de entonces.
Todos coincidieron en la
necesidad de la reforma, aunque para llevarla a cabo los gobiernos radicales y
regenadores que trabajaron en ella se encontraban con grandes inconvenientes,
siendo el principal las frecuentes guerras civiles, que hacían fracasar los
intentos de fundar una escuela militar e interrumpir la instrucción de las
tropas por oficiales extranjeros, como sucedió en dos ocasiones con la escuela
dirigida por un oficial americano y luego por la misión francesa de 1896.
En 1891 Carlos Holguín Mallarino, siendo presidente de la República, abrió brevemente la Academia Militar para la formación de oficiales, contratando al coronel norteamericano Enrique Lemly como director y al alemán Sophus Hoeg Warming como instructor de artillería.
El general Leonardo Canal González señaló la necesidad de formar oficiales científicos y relató el estado pobre en que se hallaba la escuela militar de entonces.
Coronel Norteamericano Enrique Lemly Fotografía tomada de http://www.esmic.edu.co/esmic/index.php/proceres.html |
El coronel norteamericano Lemby, antiguo instructor del Colegio Militar,
sobresalió por sus condiciones profesionales, además de sus funciones como
director de la Institución, se desempeñó como Inspector General del Ejército
hasta cuando la revolución de 1895 obligó nuevamente a clausurar tareas.
Después de la guerra de ese año, con el triunfo conservador y el reconocimiento de la calidad de los oficiales formados desde 1891, puestos a prueba en este último conflicto, Miguel Antonio Caro reemplazó en la presidencia a Carlos Holguín en el período 1892-1898 y restableció la Escuela Militar, designando para su mando a una misión militar francesa, que, fuera de mejorar el valor, localidad y producción del Ejército, incorporó palomas mensajeras en el sistema de comunicaciones.
Después de la guerra de ese año, con el triunfo conservador y el reconocimiento de la calidad de los oficiales formados desde 1891, puestos a prueba en este último conflicto, Miguel Antonio Caro reemplazó en la presidencia a Carlos Holguín en el período 1892-1898 y restableció la Escuela Militar, designando para su mando a una misión militar francesa, que, fuera de mejorar el valor, localidad y producción del Ejército, incorporó palomas mensajeras en el sistema de comunicaciones.
General Leonardo Canal González |
La nueva guerra civil que estallo en 1891, determinó el cierre
definitivo de la Escuela Militar y el siglo XIX terminó en medio de la
confrontación armada que asoló gran parte del territorio nacional y cuya
duración permitió distinguirla como la Guerra de los Mil Días, la cual tuvo
lugar entre el 17 de octubre de 1899 y el 21 de noviembre de 1902. En aquella
época la filiación política de la gran mayoría de los integrantes del ejército
era conservadora y estaban dispuestos para reprimir por la fuerza cualquier
acción revolucionaria que surgiera y que ante todo fuera oponente a los
intereses del Gobierno.
Las aspiraciones de Rafael Núñez y Miguel Antonio Caro por crear ese
Ejército se quedaron en meras intenciones debido a la exclusión que se hizo
tanto del partido Liberal como de una fracción del partido Conservador llamada
“Los Históricos” de la gestación del Estado, lo cual generó gran inestabilidad
política y polarización del aparato militar.
No se trataba de un Ejército de la “nación”, ni siquiera de la clase dominante, sino apenas de los sectores representados en el partido del Gobierno. El Ejército estaba desorientado y la participación de las guerras civiles en la política no le dejaba ver claro el camino.
No se trataba de un Ejército de la “nación”, ni siquiera de la clase dominante, sino apenas de los sectores representados en el partido del Gobierno. El Ejército estaba desorientado y la participación de las guerras civiles en la política no le dejaba ver claro el camino.
Situación del Ejército colombiano a comienzos del siglo XX
Al concluir la Guerra de los Mil Días el Ejército colombiano
arruinado pedía pronta atención, el gobierno de Rafael Reyes consiente de la
urgencia de cambios en el plano castrense, para ello contó con el auspicio de
los generales liberales Benjamín Herrera y Rafael Uribe Uribe, junto con el apoyo decidido del arzobispo primado de Colombia, Monseñor Bernardo Herrera Restrepo.
Otro de sus
propósitos fue la reforma de las milicias nacionales a partir de 1907,
contemplándose también la creación de la Escuela Militar y de una
escuela naval para formar a oficiales del Ejército y de Armada, y una Escuela
Superior de Guerra dedicada al perfeccionamiento profesional de los oficiales
de la institución castrense para los servicios de Estado Mayor y Alto Mando
Militar, que el Ejército colombiano aun no poseía.
Benjamín Herrera y Rafael Uribe Uribe |
Monseñor Bernardo Herrera Restrepo |
La reforma también contemplo la organización de unidades especiales,
orientación legal del servicio militar y la integración del Ejército Nacional,
profesionalizándolo en todas sus órdenes y actividades.
Las razones de Rafael Reyes para iniciar el proceso de profesionalización de la
institución armada fueron la necesidad de proteger el poder alcanzado; la
imposibilidad de que las operaciones militares fueran dirigidas por los
llamados “generales abogados”; la necesidad de unificar el país con miras a
implementar una política de Estado como expresión del deseo de las mayorías;
evitar otra secesión como la de Panamá, contando para ello con el ejército
dotado y capacitado para enfrentar a enemigos externos sin quedarse atrás ante
la modernización de organismos militares en Ecuador, Perú y El Salvador.
Rafael Uribe Uribe quien se encontraba fungiendo como Ministro Plenipotenciario ante los gobiernos de Chile, Argentina y Brasil, fue el encargado de estudiar la organización del ejército chileno con el fin de recomendarle al presidente Reyes la conveniencia de contratar una misión chilena para la organización militar en nuestro país.
Fue así que el modelo a seguir para implementar la reforma militar fue el chileno, ejército que sobresalía por su “probado profesionalismo heredado de sus formadores alemanes, cuyas virtudes militares ofrecían plena confianza para el futuro desempeño militar, pues Chile, vencedor en la guerra del Pacífico, gozaba de reconocido prestigio castrense”.
Fue así que el modelo a seguir para implementar la reforma militar fue el chileno, ejército que sobresalía por su “probado profesionalismo heredado de sus formadores alemanes, cuyas virtudes militares ofrecían plena confianza para el futuro desempeño militar, pues Chile, vencedor en la guerra del Pacífico, gozaba de reconocido prestigio castrense”.
En ese entonces Chile era el país latinoamericano más avanzado en la
aplicación de la Escuela Militar Prusiana, prototipo para las fuerzas militares
de América Latina.
No se desconocieron los beneficios del método chileno, tomado a su vez
del alemán, por ser racional y práctico y por sus resultados. Para Colombia.
“ya que con ellos se salvaba el Ejército de su disolución o desaparición”, se
trataba de una “prusificación de segunda mano” efectuada por el Ejército
Chileno, en vista de que países como Venezuela, Colombia y Ecuador no podían
costearse misiones europeas.
América Central y algunos países de América del Sur, tomando el modelo ya mencionado, creyeron que con la profesionalización de sus ejércitos no serían utilizados en la lucha política entre sus partidos y serían un apoyo seguro en la protección de la soberanía nacional contra Estados Unidos.
Así, hubo consenso sobre las razones que motivaron a Colombia a elegir el modelo chileno para alcanzar la modernización de su Ejército.
América Central y algunos países de América del Sur, tomando el modelo ya mencionado, creyeron que con la profesionalización de sus ejércitos no serían utilizados en la lucha política entre sus partidos y serían un apoyo seguro en la protección de la soberanía nacional contra Estados Unidos.
Así, hubo consenso sobre las razones que motivaron a Colombia a elegir el modelo chileno para alcanzar la modernización de su Ejército.
Se inició entonces la relación castrense entre Chile y Colombia con un
activo envío de jóvenes colombianos a estudiar en la Escuela Militar de
Santiago, la autorización por parte de Chile para que oficiales colombianos se
incorporaran en su Ejército y un intercambio de información sobre leyes,
reglamentos y organizaciones militares.
Finalmente se contrataron dos oficiales chilenos Capitán Arturo Ahumada Bascuñan y Capitán Diego Guillén Santana, egresados ambos de academias militares alemanas y quienes se dispusieron trabajar en el primer objetivo; la creación de la Escuela Militar. Transcurridos dos meses, el Gobierno colombiano impulsó la idea de crear dicho establecimiento con el apoyo del presidente Rafael Reyes y del general Rafael Uribe Uribe, Así, el 13 de abril de 1907, por Decreto 434 se dispuso la fundación de la Escuela Militar.
Finalmente se contrataron dos oficiales chilenos Capitán Arturo Ahumada Bascuñan y Capitán Diego Guillén Santana, egresados ambos de academias militares alemanas y quienes se dispusieron trabajar en el primer objetivo; la creación de la Escuela Militar. Transcurridos dos meses, el Gobierno colombiano impulsó la idea de crear dicho establecimiento con el apoyo del presidente Rafael Reyes y del general Rafael Uribe Uribe, Así, el 13 de abril de 1907, por Decreto 434 se dispuso la fundación de la Escuela Militar.
Capitán Arturo Ahumada B. Fotografía tomada de http://www.esmic.edu.co/esmic/index.php/fundadores.html |
Capitán Diego Guillen Santana Fotografía tomada de http://www.esmic.edu.co/esmic/index.php/directores.html |
Según este decreto, dicha escuela dependía directamente del Ministerio
de Guerra. Por lo tanto, quedaba como director de la escuela el oficial chileno
Ahumada y como subdirector el oficial Guillén. A los alumnos que entraban a la
escuela se les denominaba Cadetes y su número no pasaba de cien.
En julio de 1907 el director de la Escuela Militar envió un plan de estudios al Ministro de Guerra en el que incluyó no sólo las materias a tratar, sino también una serie de recomendaciones sobre “lo que más conviene para mejorar los intereses del Ejército”.
La escuela produjo el primer contingente de subtenientes en 1908. Además se organizaron los cursos de aplicación para jefes y oficiales antiguos que, una vez preparados, se repartieron en varias unidades militares en diferentes partes del país.
Planta de profesores en 1907
Fotografía tomada de la
http://www.asisucedio.co/escuela-militar/#_ftnref3
Cadetes fundadores de la Escuela Militar en 1907 Fotografía tomada del Libro Histórico de la Escuela Militar de Cadetes General José María Cordova |
En julio de 1907 el director de la Escuela Militar envió un plan de estudios al Ministro de Guerra en el que incluyó no sólo las materias a tratar, sino también una serie de recomendaciones sobre “lo que más conviene para mejorar los intereses del Ejército”.
La escuela produjo el primer contingente de subtenientes en 1908. Además se organizaron los cursos de aplicación para jefes y oficiales antiguos que, una vez preparados, se repartieron en varias unidades militares en diferentes partes del país.
Claustro de San Agustín año 1908-Primera sede de la Escuela Militar Fotografía tomada del Libro Histórico de la Escuela Militar de Cadetes General José María Cordova |
El uso del pickelhaube, comienza con la gran reestructuración de las Fuerzas Armadas Colombianas de 1907. El uso de los cascos prusianos de espiga fue infundido por la primera misión chilena que ayudó a fundar la Escuela Militar y profesionalizar el Ejercito Nacional Colombia.
En la Fotografía aparece en primer plano el Capitán Arturo ahumada portando un casco prusiano elemento que fue adoptado por la Escuela Militar Colombiana |
Como resultados de esta influencia, se cambiaron los uniformes por los usados por tropas chilenas, los que a su vez habían sido adoptados del Ejército Prusiano, destacándose que el casco con virola y el casco con penacho de crin usado inicialmente por la Escuela Militar Colombiana cambiaba únicamente el escudo, primero prusiano, luego chileno y ahora colombiano.
Casco con escudos Prusiano, Chileno y Colombiano |
Aún hoy el casco de punta y los uniformes para ceremonias realzan las presentaciones y el desfile de la Academia Militar, el Batallón de la Guardia de la Presidencia (Guardia Presidencial) y la Escuela de Cadetes de la Policía Nacional.
En segundo lugar, se adoptaron las formas militares enseñadas por los chilenos, correspondientes a la doctrina de la escuela prusiana incluyendo la marcha, paradas, ejercicios con y sin armas y las voces de mando entre otros.
Actualmente, las Fuerzas Militares colombianas practican estos
ejercicios todo esto denominado “Orden Cerrado”.
Así mismo, por primera vez en la historia militar colombiana una
Escuela Militar no fue cerrada por guerras civiles o por problemas fiscales o
económicos, como ocurrió con otras escuelas en el siglo XIX, que si fueron
cerradas por motivos ya expuestos. La escuela Militar de cadetes se mantuvo y
continúa funcionado hasta la fecha.
Uso del casco prusiano en la Policía Nacional
Los archivos documentales de la Revista de la Policía Nacional de Colombia, dan fe, que el uso del casco prusiano y el traje de parada que en su momento introdujo en nuestro país la Misión del Ejército Chileno integrada por los Capitán Arturo Ahumada Bascuñan y Capitán Diego Guillén Santana fundadores de la Escuela Militar en 1907, no fue un uniforme de uso exclusivo para el Ejército Colombiano, sino que también lo empezaron a portar los oficiales superiores de la Policía Nacional desde el año 1928, cuando fungía como director de la Institución el doctor José María Dávila Tello.
Uso del casco prusiano en la Policía Nacional
Los archivos documentales de la Revista de la Policía Nacional de Colombia, dan fe, que el uso del casco prusiano y el traje de parada que en su momento introdujo en nuestro país la Misión del Ejército Chileno integrada por los Capitán Arturo Ahumada Bascuñan y Capitán Diego Guillén Santana fundadores de la Escuela Militar en 1907, no fue un uniforme de uso exclusivo para el Ejército Colombiano, sino que también lo empezaron a portar los oficiales superiores de la Policía Nacional desde el año 1928, cuando fungía como director de la Institución el doctor José María Dávila Tello.
Otro dato que confirma aun más dicha aseveración, son las fotografías que la Revista de la Policía Nacional de la fecha, publicó en un articulo referente a la revista militar o desfile que realizó miembros de la Institución en el mes de abril de 1928, en ellas se observan que tanto los oficiales superiores que lideran los diferentes bloques y un grupo de fusileros, portaban el uniforme de parada con su respectivo casco prusiano.
El citado articulo titulado "REVISTA MILITAR DE LA POLICÍA" anotaba:
"La celebración de la revista militar o desfile público programado por el director de la Policía José Maria Dávila Tello, tenia como objetivo dar a conocer del público de la capital, no sólo la organización y presentación de diversos Cuerpos de Servicio de Policía, sino el espíritu militar y la disciplina que podían exhibir sus hombres.
El evento fue presidido por el Excelentísimo señor Presidente de la República Miguel Abadía Méndez, quien se hallaba acompañado por sus Ministros del Despacho, del Procurador General de la Nación y de algunos funcionarios militares.
El desfile militar fue dirigido por el Prefecto General de Policía de Vigilancia, Comandante Antonio Gómez Franco, quien portaba traje de parada con su respectivo casco prusiano, lo mismo que los demás oficiales y tropa que actuaron en él.
La ciudad presenció este desfile de la Policía con singular adhesión y complacencia, prorrumpiendo la enorme concurrencia, en vitores y aplausos, no solamente al paso de las Divisiones por el frente de la tribuna presidencial en la Plaza de Bolivar, sino por dondequiera de las calles y avenidas de la ciudad que recorrió el gran desfile."
Uso del Casco Prusiano en la Escuela de Cadetes de Policía "General Francisco de Paula Santander"
Antes de puntualizar sobre la fecha en la cual se da inicio al uso del pickelhaube (casco Prusiano), en la Escuela de Cadetes de Policía "General francisco de Paula Santander", es muy importante citar una corta reseña histórica del como se inicia la construcción y posterior fundación de dicha escuela.
Doctor Alfonso López Pumarejo Presidente de la República |
Corría la primera mitad de la década de los años 30’s, cuando el doctor Alejandro Bernate, fue nombrado director de la Policía Nacional mediante Decreto No. 1503 de 1935, en el gobierno del doctor Alfonso López Pumarejo y el ministerio de Gobierno del doctor Darío Echandia.
El doctor
Bernate en realidad fue quien dio el paso para la creación de una
definitiva escuela de policía, con carácter nacional, como un centro docente
con todas las características de orientación y preparación para lo que debería
ser el semillero de los futuros miembros de la Policía. Como Colombia
lo esperaba.
En efecto, Alejandro Bernate, por intermedio de la Caja de Auxilios de la Policía Nacional, adquirió un lote de 14.719 metros cuadrados en el sitio que se denominaba hacienda “Muzú”, situada en el kilómetro 8 de la carretera que de Bogotá conduce aL Tequendama y con destino a la construcción de los locales de la escuela de Policía.
Doctor Alejandro Bernate Director de la Policía Nacional 1935-1936 |
A la vez, el
director Bernate señalaba con clara visión que era hora de iniciar la genuina
carrera profesional del funcionario de Policía.
Su iniciativa fue, pues, el comienzo de la estabilidad, principalmente de la carrera del oficial de Policía en Colombia y también del resto del personal, pues allí se capacitaría igualmente suboficiales, detectives y agentes.
El 18 de julio
de 1936, el presidente de Colombia Alfonso López expidió el Decreto 1715, que
se refiere a la creación de escuelas, pero es en el año siguiente, con el
Decreto 1277 de julio 7, cuando se sienta las bases legales para la iniciación
de la Escuela de Policía “General Santander”, destinada a la formación y
perfeccionamiento del personal de oficiales, suboficiales, detectives y agentes
de Policía de Colombia. El instituto funcionaría, como escuela de iniciación
para la preparación técnica del nuevo personal de la Policía Nacional en la
rama de Servicios rural, urbano, aduanas, fronteras terrestres y marítimas,
ferrocarriles y sanidad, y, como escuela de aplicación para el
perfeccionamiento del personal en servicio.
En el citado decreto, sin considerandos,
contenía 13 artículos de los cuales uno, el número 11, se refería a la creación
de escuelas de policía. El texto decía: “el gobierno establecerá la escuela o
escuelas de la policía necesarios para atender a la formación de los oficiales,
suboficiales y agentes, como también para el perfeccionamiento del personal en
servicio. En consecuencia, dictará los
reglamentos que fueren del caso.”
MISIÓN CHILENA DE CARABINEROS
En el año de
1936, y compuesto por los distinguidos Oficiales Coronel Armando Romo
Boza, Capitán Belarmino Torres Vergara y Teniente Emilio Oelskers
Holstein, contratados por el Gobierno Nacional para la organización e instrucción
de la Policía Nacional, vino al país la Misión Militar de Carabineros de Chile.
Las labores
desarrolladas por esta Misión fueron múltiples y variadas, destacándose, la del
Teniente Emilio Oelskers Holstein, quien permaneció dos años más en Colombia
que los otros miembros de la Misión Chilena.
La Misión Chilena llevó a cabo Cursos de Perfeccionamiento, Preparación e Información para todos los Jefes, Oficiales y Suboficiales de la Institución, implantando nuevos sistemas de instrucción policial y militar de la Policía fundada en la doctrina de la escuela prusiana, igual como lo hicieron sus coterráneos en 1907 cuando crearon la Escuela Militar.
Establecieron, con gran beneficio para la instrucción y los servicios, el turno de seis (6) horas de vigilancia, dividiéndose cada Unidad en cuatro pelotones o secciones que, alternada y conforme a directivas especiales, prestaban el servicio de vigilancia.
Numerosas
y variadas son las directivas sobre servicios, instrucción, documentación,
administración y demás materias relacionadas con la función policial, que dejó
la Misión Chilena de Carabineros para la Policía Nacional, y su colaboración
entusiasta y eficiente para la labores de perfeccionamiento de la
Institución fueron de inapreciable valor.
El
reconocimiento del valioso contingente prestado por la Misión Chilena en la
organización de la Policía Nacional, fue hecho, por el señor Presidente de la
República doctor Eduardo Santos Montejo, en la persona del Teniente Emilio
Oelskers Holstein a quien condecoró con la Cruz de Boyacá.
En 1938 Inician la construcción de la Escuela de Cadetes de Policía "General Francisco de Paula Santander"
Como fuente
inmediata de creación de este instituto, está el Decreto 1715 de 1938 (18
agosto) en cuyo artículo 11 dice: “El Gobierno establecerá las escuelas o
escuela de la Policía Nacional, necesarias para atender a la formación de
Oficiales, Suboficiales y Agentes, como también para el perfeccionamiento del
personal en servicio; en consecuencia dictara los reglamentos que fueren del
caso”.
Con fundamento en lo anterior el Presidente de la República dicto el Decreto 1277 de 1937, en cuyo artículo 1, crea la Escuela Nacional de Policía “General Santander”, agrega también que funcionara como escuela de iniciación para la preparación técnica del nuevo personal de la Policía Nacional en los ramos de servicio urbano, rural, aduanas, fronteras terrestres y marítimas, sanidad etc.. Y como escuela para el perfeccionamiento del personal actualmente en servicio.
La Escuela General Santander- 1940
El Decreto 505 de 1940 crea el Departamento Docente de la Policía, a cargo del director de la escuela, cuyo fin es el de formar y educar al personal de la Policía Nacional
Doctor Eduardo Santos Montejo Presidente de la Republica |
El 15 de mayo de 1940, se dicto el Decreto 945, bajo la administración de Eduardo Santos Montejo se organizó de la Escuela de Policía “General Santander” a la que se le confiaron las funciones docentes de la Policía Nacional y donde también se consignaron los objetivos fundamentales del plantel, se determinaron los cursos que debían desarrollarse y se inicio la instrucción con modernas orientaciones profesionales. Este decreto fue derogado ese mismo año por los Decretos 1158 y 1216 del mismo año, que dicto su reglamento y designo su personal.
Primer Director de la Escuela General Santander
Mediante Decreto 945 del 15 de mayo de 1940, emanado por el doctor Eduardo Santos M., se nombro al primer Director de la Escuela “General Santander “ en la persona del doctor Luis Andrés Gómez, prestigiosos abogado santandereano (Vélez). Bajo cuya rectoría se iniciaron las labores docentes el 16 de mayo de dicho año.
El 16 de mayo de 1940 inició labores docentes la Escuela de Policía General Santander, con 52 aspirantes a oficiales. Este primer curso se denominó “Simón Bolívar”, de los cuales se graduaron solo 47 oficiales, ceremonia que se realizó en el mes de noviembre del mismo año. Entre ellos los que más tarde jugaron papel importante en la vida de la Institución fueron los coroneles Juan Félix Mosquera, José Ramírez Merchán y Ernesto Polanía Puyo, el mayor Luis Ospina Navia, el Capitán Antonio Arciniegas Castilla y el General Bernardo Camacho Leyva, quien como teniente asumió la defensa de la propia escuela en los días ácigos del 9 de abril, correspondiéndole luego instruir a los militares en el orden docente y administrativo, por haber sido señalados para organizar la Policía Militar como cuerpo de transición que había de llenar el vacío dejado por el licenciamiento de la Policía Nacional.
El Oficial Bernardo Camacho Leyva llegaría a ser Director de la Policía Nacional, en momentos institucionales muy difíciles, logrando con maestría, inteligencia y carácter imprimirle rumbo a la Fuerzas de Policía, sobre una vía que abrió para ésta los caminos del progreso y de la independencia de sus propios destinos.
En la foto: Los Graduados en compañía del Doctor Eduardo Santos Montejo, Presidente de la República, el General Alfredo Azuero Arenas, Director de la Policía Nacional y el Doctor Luis Andrés Gómez Director de la Escuela.
La Escuela de Cadetes de Policía "General Francisco de Paula Santander" después del Bogotázo-9 de abril de 1948.
En el tiempo transcurrido entre el 9 de abril de 1948, después de liquidada la Policía Nacional, la escuela fue tomada para instruir un personal militar para formar lo que se denominó "Policía Militar" a quienes se les señalo las funciones de vigilar a Bogotá en remplazo de la Policía Nacional.
Sin embargo, el Instituto, ya en 1949 se fue abandonando por parte del Ejército hasta que se dispone, en coordinación con la Misión Inglesa recientemente contratada por el Gobierno y con base en un nuevo estatuto organizar la Policía Nacional (Decreto 2136 de 1949), el nuevo funcionamiento de la escuela con unos cursos extraordinarios de cadetes y otros de suboficiales, detectives y agentes, que se iniciaron en febrero del año 1950 y terminaron en diferentes fechas del mismo año.
En su momento estos programas se consideraron el comienzo de una nueva policía y por ello el curso de oficiales de 1950, se graduó el 17 de diciembre del citado año (Decreto 3685) de donde egresaron ochenta y seis (86) "subcomisarios a prueba", lo cual demuestra que fue extraordinario por su corta duración y la necesidad que para ese momento tenia la Policía Nacional de nuevos mandos.
Entonces, este primer curso de cadetes de una "nueva época", fue llamado como "Juan José Rondón", y cuando por Resolución No. 1805 del 24 de mayo de 1954 se reglamenta la denominación y se establece el orden de las promociones de oficiales que egresaron de la Escuela de Policía "General Santander" desde su fundación en 1940, este ocuparía el octavo lugar en las promociones. Aunque popular e irónicamente -para algunos- aun hoy, se les conoce como el curso de los sabios. Fue el primero en lograr que cinco de sus integrantes fuesen generales en el año de 1975, en lo cual tuvo influencia definitiva el mayor general Henry García Bohórquez.
Doctor Mariano Ospina Pérez Presidente de la República |
Primer curso de perfeccionamiento de oficiales- 1953
Los cursos de perfeccionamiento se volvieron obligatorios para todos los oficiales, suboficiales, detectives y agentes de la policía en servicio activo y serán eliminados los que no reúnan las condiciones que se determinaron; en consecuencia se dispuso que el departamento de instrucción y formación del personal, en el proyecto de reglamento de la carrera de oficiales, recogiera y detallara estos antecedentes, para erigir también como requisito indispensable para el ascenso en los diferentes grados, la aprobación de un curso de perfeccionamiento.
El primer curso de perfeccionamiento de oficiales se realizó en 1953, quienes ingresaron a la escuela el día 15 de junio. Por tal fin, la Dirección General de la Policía Nacional, por Resolución No. 1335 del 28 de mayo de 1953, aprobó el presupuesto de admisión para los oficiales que fuesen llamados a adquirir mayores conocimientos y a perfeccionar los ya adquiridos, en todo lo relacionado con la carrera policial.
Llega el casco prusiano a la Escuela de Cadetes de Policía "General Francisco de Paula Santander"-1955
En el año de 1955 la Escuela de Policia "General Santander" fue objeto de una gran reorganización, el cambio de orientacion impuesto por el Gobierno Nacional pretendia dotar al país de una institucion policial altamente tecnificada y el deseo del Presidente de la República Teniente General Gustavo Rojas Pinilla y de sus inmediatos colaboradores en la Direccion de la Policia Nacional el señor Mayor General Deogracia Fonseca Espinoza y en la Escuela el señor Coronel Carlos Galindo Ruiz (ambos miembros del ejército nacional), era de trasnformar a la Policía, en un autentico instrumentos de cultura, de civilización y de progreso, no ya al servicio de un movimiento politico sino de la comunidad entera.
Teniente General Gustavo Rojas Pinilla Presidente de la República |
Mayor General Deogracia Fonseca Espinoza |
Paralelo a los cambios anteriores, en 1955 se dispuso por parte de los mandos institucionales, la implementación de nuevos uniformes de gala para los cadetes de la Escuela de Policia "General Santander", el cual consistia en una guerrera gris, con pantalón negro o blanco con trabilla (color usado segun la ceremonia), chapa y botonadura plateada y guantes y fornitura blanca y los más relevante, fue la implementacion del uso de casco prusiano (pickelhaube) para portarlo con este uniforme:
Podria decirse enonces que la implementación del Casco Prusiano en la Escuela de Policia "General Santander", se deriva de las ideologias militares impuestas en 1907 por la Mision Chilena que ayudó a fundar la Escuela Militar "José Maria Cordova" y a profesionalizar el Ejercito Nacional Colombia, las cuales fueron heredadas por todos militares que egresaron de la misma y que para 1955 estos fungian como Presidente de la República, Director de la Policia Nacional y de la Escuela de Policia "General Santander" por lo tanto, era de suma importancia para ellos poderlas aplicar en la Policía Nacional.
Nuevo Uniforme de Gala 1955 |
Uniforme de Gala con Casco Prusiano-1955 |
Fotografía, que corrobora que el uso e implementación del pickelhaube o casco Prusiano como parte del uniforme de gala o de ceremonia para los cadetes de las Escuela de Policía "General Santander" data desde finales del año de 1955, lo que indica que posiblemente fueron los integrantes del curso de oficiales No 14 Promoción "Camilo Torres Tenorio" los pioneros en portar este elemento.
fotografía tomada del libro "Hechos y Crónicas 1940-1999" |
Tambien cobra importancia el artículo denominado "Bienvenido mi Alférez", publicado en las paginas 131 a la 134 del referido libro, escrito por Ciro Oliveros O´meras Shehoroer quien fuese integrante del curso de oficiales No 16, promoción José Custodio García Rovira, donde manifiesta entre otras cosas, "el haber estrenado el uniforme de gala" asi como su participacion en tres ceremonias: la correspondiente a la graduacion de la promoción Camilo Torres Tenorio (Curso 14 de oficiales) y la del 5 de noviembre a la que asistió, el Presidente de la República el Teniente General Gustavo Rojas Pinilla vestido con uniforme de las Fuerzas de Policía.
Corrobora tambien lo anterior, los antecedentes fotograficos existentes en los archivos históricos documentales de la Revista de la Policía Nacional, que citan datos relacionados con dichas ceremonias y en las cuales se observa a los integrantes del curso 14 de oficiales, con uniforme de gala y portando el casco prusiano con penacho.
Por lo tanto no cabe duda que la implementación y uso del tan representativo elementos como lo es el casco prusiano se inció en el año de 1955 y se consolido aun más en 1957.
Uso del casco prusiano por los primeros Alféreces del Instituto
Cabe anotar que
en virtud del Decreto No. 1339 de 1 de julio de 1957, fue conferido el grado de
"Alférez" a distinguidos cadetes de la Escuela de Policía
"General Francisco de Paula Santander", por lo tanto tal distinción
la ostentaron por primera vez los cadetes integrantes curso 16
Promoción José Custodio García Rovira, graduados como Subtenientes
mediante Decreto 1919 del 18 de septiembre de 1957.
Fotografia en la cual se observa a los nuevos "Alfereces" portando uniforme de gala con casco prusiano. |
Mosaico donde aparecen los integrantes del curso 16 "Custodio García Rovira" primeros Alfereces de la Escuela de Policía |
El Casco Prusiano que es utilizado por la Escuela de Policía "General Santander" desde 1955 se diferencia con el de la escuela militar en el escudo.
Para el caso de la Policía esta conformado por una estrella de cinco puntas con dos de éstas mirando hacia abajo, su simbolismo heráldico establece que es la estrella de cinco rayos, llamada de David y por otros atribuida a Salomón. Es la Estrella de la Policía Universal y puesta en sus escudos, es un acto de adoración al supremo Gobernador del Mundo. Representa los cinco atributos divinos de grandeza, verdad, luz, majestad y paz.
La estrella irá surmontada por el Escudo de Colombia a manera de escusón.
De otra parte el casco prusiano de la escuela militar consta solamente del escudo de Colombia al igual que el usado por el Batallón Guardia Presidencial.
1. Casco con penacho cuando se participe del destacamento.
Accesorios para oficial superior
Accesorios para oficial subalterno
UNIFORME SOCIAL No. 2
Definición y uso
Accesorios para alféreces y cadetes
ÁLBUM FOTOGRÁFICO USANDO UNIFORME DE GALA No 1
(Casco Prusiano con penacho)
Fuentes consultadas:
http://www.taringa.net/posts/apuntes-y-monografias/19862803/Pickelhaube-un-simbolo-del-espiritu-militar-prusiano.html
http://guerrasnapoleonicas.blogspot.com.co/2011/03/caballeria-pesada-o-de-reserva.html
http://revistahistoria.udec.cl/wp-content/uploads/2015/12/Desercion-disciplinamiento-y-a-Felipe-Delgado.pdf
http://www.asisucedio.co/escuela-militar/#_ftnref3
http://www.esmic.edu.co/esmic/index.php/proceres.html
Revista Policía Nacional de Colombia
Libro "Hechos y Crónicas 1940-1999", Escuela de Policía "General Santander"
La estrella irá surmontada por el Escudo de Colombia a manera de escusón.
De otra parte el casco prusiano de la escuela militar consta solamente del escudo de Colombia al igual que el usado por el Batallón Guardia Presidencial.
UNIFORMES DE LA POLICÍA NACIONAL Y SU USO CON CASCO PRUSIANO.
(Conforme a lo establecido en el Reglamento de Uniformes, Insignias, Condecoraciones y Distintivos de la Policía Nacional-Resolución No.03372 del 26 de octubre de 2009)
UNIFORME DE GALA No 1
Definición y uso.
Corresponde al uniforme que usará el personal de oficiales,
alféreces, cadetes y el personal de la banda de músicos para asistir a eventos
formales y de especial trascendencia institucional tales como:
1. Visita a / de jefes de Estado.
2. Actos sociales a los que asisten los particulares en traje
de frac.
3. Desfiles de honor.
4. Contraer nupcias, para oficiales (utilizará charreteras o
caponas dependiendo del grado).
5. Ceremonias policiales y militares que exijan el porte de
este uniforme.
6. Por disposición del mando.
Los
oficiales que acompañen en el matrimonio a otro oficial, utilizarán presillas
en su uniforme.
Descripción
1. Cubrecabezas tipo kepis color azul oscuro con ribete verde
esmeralda.
2. Camisa color blanco, sin cuello, manga larga, puño doble.
3. Guerrera color azul oscuro o blanco, según corresponda al
clima, con ribete verde esmeralda y botones dorados con el escudo de la Policía
Nacional.
4. Mancornas doradas con el escudo de la Policía Nacional.
5. Falda línea recta, que cubra la rodilla, color blanco o
azul oscuro, según corresponda al clima, con abertura trasera y ribete verde
esmeralda.
6. Calzado en charol color negro, de tacón.
7. Pantalón blanco o azul oscuro, según corresponda al clima,
con ribete verde esmeralda.
8. Calcetines blancos para el pantalón blanco y negros para
el pantalón azul.
9. Calzado liso de amarrar, en charol color negro.
Accesorios para oficial General
1. Casco con penacho cuando se participe del destacamento.
2. Carrillera en hilo dorado.
3. Laureles dorados en el cuello y puños de la guerrera.
4. Charreteras doradas con insignias de grado, tamaño grande
en metal.
5. Escudos de Colombia pequeños con ramas de laurel,
colocados en los extremos del cuello de la guerrera.
6. Joyas de las condecoraciones de acuerdo al título III del
presente reglamento.
7. Cordón de mando dorado.
8. Guantes en cabritilla blanca.
9. Cinturón de gala en hilo dorado con banda tricolor y chapa
con escudo repujado.
10. Tiro en hilo dorado.
11. Dragona en hilo dorado.
12. Espada para ceremonias policiales.
13. Bastón de mando de gala, para actos sociales.
14. Espolines dorados.Accesorios para oficial superior
2. Carrillera en hilo dorado.
3. Charreteras plateadas con insignias de grado, tamaño
grande en metal. Para Mayor se utiliza una barra; para Teniente Coronel, dos
barras; y para Coronel, tres barras.
4. Escudos de Colombia pequeños, colocados en los extremos
del cuello de la guerrera.
5. Joyas de las condecoraciones, de acuerdo al título III del
presente reglamento.
6. Cordón plateado para oficiales diplomados en la Academia
Superior de Policía (ASPOL).
7. Guantes en cabritilla blanca.
8. Cinturón de gala en hilo plateado con banda tricolor y
chapa con escudo repujado.
9. Tiro en cuero blanco.
10. Dragona en hilo plateado y cuero negro.
11. Sable para oficial superior.
12. Espolines plateados.
Accesorios para oficial subalterno
1. Casco con penacho cuando se participe del destacamento.
2. Carrillera en hilo dorado.
3. Caponas doradas con insignias de grado, tamaño grande en
metal.
4. Insignias de la modalidad pequeña, colocadas en los
extremos del cuello de la guerrera.
5. Joyas de las condecoraciones, de acuerdo al título III del
presente reglamento.
6. Guantes en cabritilla blanca.
7. Cinturón de gala en hilo plateado con banda tricolor y
chapa con escudo repujado.
8. Tiro en cuero blanco.
9. Dragona en hilo plateado y cuero negro.
10. Sable para oficial subalterno.
11. Espolines plateados.
Uniforme para el personal
de la banda de músicos
El personal de la banda
de músicos de la Policía Nacional utilizará el uniforme social No 2; para actividades
ceremoniales de la Escuela de Cadetes de Policía General Francisco de Paula
Santander utilizará el uniforme de gala de alféreces y cadetes, con los accesorios que correspondan a las
insignias de grado y la modalidad, además de la fornitura charolada blanca, el
casco con penacho y guantes blancos.
Descripción del uniforme de gala para alféreces
y cadetes de la Escuela de Cadetes de Policía General Francisco de Paula
Santander.
1. Cubrecabezas tipo kepis gris de presentación.
3. Guerrera color gris, con cuello y puños verde esmeralda
con botones dorados con el escudo de la Policía Nacional.
4. Galón dorado en el borde superior de las mangas y cuello
de la guerrera para alféreces.
5. Mancornas doradas, con el escudo de la Escuela de Cadetes
de Policía General Francisco de Paula Santander.
6. Falda línea recta, que cubra la rodilla, color blanco con
abertura trasera y ribete doble verde esmeralda.
7. Calzado en charol color negro, de tacón.
8. Pantalón blanco, con ribete doble, verde esmeralda.
9. Calcetines blancos.
10. Calzado liso de amarrar en charol, color negro.
Accesorios para el uniforme
de gala de alféreces y cadetes
1. Casco con penacho para servicios.
2. Monogramas metálicos de la Escuela, colocados en el porta
presillas de la guerrera.
3. Escudos de la Escuela pequeños, colocados en los extremos
del cuello de la guerrera.
4. Charreteras distintivas para la banda de ceremonias.
5. Guantes blancos.
6. Fornitura charolada blanca, con chapa metálica dorada y
escudo repujado de la Policía Nacional.
7. Tiro en cuero blanco.
8. Dragona en cuero blanco.
9. Sable para alféreces.
10. Daga para cadetes.
UNIFORME SOCIAL No. 2
Definición y uso
Uniforme que usará el
personal de oficiales, miembros del nivel ejecutivo, suboficiales (a partir del
grado de Intendente y Sargento Segundo, respectivamente), alféreces y cadetes
para asistir a los siguientes eventos:
1. Graduación como
oficial.
2. Recepciones y eventos formales nocturnos, cuya etiqueta
indique esmoquin, corbata negra o traje largo.
3. Acompañamiento al Santo Sepulcro.
4. Actos de especial solemnidad.
5. Tedeum.
6. Contraer nupcias en el caso del nivel ejecutivo y los
suboficiales.
7. Cuando lo disponga el mando institucional.
Descripción
1. Cubrecabezas tipo kepis color azul oscuro, con ribete
verde esmeralda.
2. Camisa color blanco, sin cuello, manga larga, puño doble.
3. Guerrera color azul oscuro, con ribete verde esmeralda y
botones dorados con el escudo de la Policía Nacional.
4. Mancornas doradas con el escudo de la Policía Nacional.
5. Falda línea recta, que cubra la rodilla, color azul
oscuro, con abertura trasera y ribete verde esmeralda.
6. Calzado en charol negro de tacón.
7. Pantalón color azul oscuro, con ribete verde esmeralda.
8. Calcetines negros.
9. Calzado liso de amarrar en charol negro.
Accesorios para oficial
General
1. Casco con virola (servicios especiales).
3. Laureles dorados en el cuello y puños de la guerrera.
4. Presillas trenzadas en color dorado para General, con
insignias de grado tamaño grande en metal.
5. Escudos de Colombia grandes, en metal con ramas de laurel,
colocados en los extremos del cuello de la guerrera.
6. Miniaturas o réplicas de las condecoraciones de acuerdo al
título III del presente reglamento.
7. Cordón de mando dorado.
8. Guantes en cabritilla blanca.
9. Tiro en hilo dorado.
10. Dragona en hilo dorado.
11. Espada para ceremonias policiales.
12. Bastón de mando de gala para actos sociales.
13. Espolines dorados.
Accesorios para los grados de oficial superior
1. Casco con virola (servicios especiales).
2. Carrillera en hilo dorado.
4. Presillas trenzadas en color dorado para General, con
insignias de grado tamaño grande en metal.
5. Escudos de Colombia grandes, en metal con ramas de laurel,
colocados en los extremos del cuello de la guerrera.
6. Miniaturas o réplicas de las condecoraciones de acuerdo al
título III del presente reglamento.
7. Cordón de mando dorado.
8. Guantes en cabritilla blanca.
9. Tiro en hilo dorado.
10. Dragona en hilo dorado.
11. Espada para ceremonias policiales.
12. Bastón de mando de gala para actos sociales.
13. Espolines dorados.
Accesorios para los grados
de oficial subalterno
1. Casco con virola (servicios especiales).
2. Carrillera en hilo dorado.
3. Presillas trenzadas para oficial subalterno con insignias
de grado metálicas grandes.
4. Insignias de la modalidad pequeñas, colocadas en los
extremos del cuello de la guerrera.
5. Miniaturas o réplicas de las condecoraciones de acuerdo al
título III del presente reglamento.
6. Guantes en cabritilla blanca.
7. Tiro en cuero blanco.
8. Dragona en hilo plateado y cuero negro.
9. Sable para oficial subalterno.
10. Espolines plateados.
Uniforme social para alféreces y cadetes de la Escuela de Cadetes de Policía General Francisco de Paula Santander.
1. Casco con virola para eventos fúnebres.
3. Guerrera color gris, con cuello y puños verde esmeralda con botones dorados con el escudo de la Policía Nacional.
4. Galón dorado en el borde superior de las mangas y cuello de la guerrera para alféreces.
5. Mancornas doradas, con el escudo de la Escuela de Cadetes de Policía General Francisco de Paula Santander.
6. Guantes blancos.
7. Falda línea recta, que cubra la rodilla, color negro, con abertura trasera y ribete doble, verde esmeralda.
8. Calzado en charol color negro, de tacón.
9. Pantalón negro, con ribete doble, verde esmeralda.
10. Calcetines negros.
11. Calzado liso de amarrar en charol, color negro.Accesorios para alféreces y cadetes
1. Monogramas metálicos de la Escuela, colocados en el porta
presillas de la guerrera.
2. Escudos de la Escuela colocados en los extremos del cuello
de la guerrera.
3. Fornitura charolada blanca con chapa metálica dorada y
escudo repujado.
4. Tiro en cuero blanco.
5. Dragona en cuero blanco.
6. Sable para alféreces.
ÁLBUM FOTOGRÁFICO USANDO UNIFORME DE GALA No 1
(Casco Prusiano con penacho)
http://www.taringa.net/posts/apuntes-y-monografias/19862803/Pickelhaube-un-simbolo-del-espiritu-militar-prusiano.html
http://guerrasnapoleonicas.blogspot.com.co/2011/03/caballeria-pesada-o-de-reserva.html
http://revistahistoria.udec.cl/wp-content/uploads/2015/12/Desercion-disciplinamiento-y-a-Felipe-Delgado.pdf
http://www.asisucedio.co/escuela-militar/#_ftnref3
http://www.esmic.edu.co/esmic/index.php/proceres.html
Revista Policía Nacional de Colombia
Libro "Hechos y Crónicas 1940-1999", Escuela de Policía "General Santander"