Este documento, busca recopilar y ordenar los antecedentes documentales y bibliográficos existentes sobre un tema que la mayoría de las veces, aparece difuso, de difícil comprensión y que en raras ocasiones, ha sido tratado en la forma de una evolución cronológica.
Condottiere, por Artemisia Gentileschi . |
Los modernos grados utilizados
en los ejércitos y algunas policías tienen su origen en las compañías de soldados del
Renacimiento, en España e Italia, cuando los guerreros profesionales y
Condottieri, comenzaron a reemplazar a los soldados de leva de la Edad Media.
Se puede afirmar, que el origen
del nombre de los grados, está dado por el de las organizaciones militares que
les dieron lugar.
Las de la época a que hacemos referencia, contemplaban el
agrupamiento de los hombres en grupos de compañeros o compañías, a la cabeza de
las cuales, se encontraban como jefes de la tropa o caudillos, los Capitanes,
término derivado del latín caput(cabeza), del que derivaron también, los
vocablos Hauptmann (en alemán) y Captain (en inglés).
Estas, también se llamaron
Capitanías y su efectivo era de aproximadamente 500 hombres. La reunión de
capitanías, constituía un ejército, a órdenes de un capitán de capitanes o
Capitán General.
En España, desde la creación de las Guardias Viejas de Castilla, en tiempos de los Reyes Católicos, la Capitanía o Compañía, comenzó a ser considerada una unidad técnica, orgánica, táctica y administrativa. Su jefe o comandante, el Capitán, se elegía entre los guerreros de mayor prestigio e intachable conducta, que hubiera servido seis años en calidad de soldado y tres como alférez.
Tenía propiedad sobre esta y de
hecho, también autoridad para nombrar a quienes le secundaran en el comando.
De tal suerte, surge el grado de Teniente, o Lugarteniente, cuyo nombre tiene su origen en la acción de tener o aspirar el cargo o ministerio, en este caso, del Capitán, a quien incluso, accidentalmente puede reemplazar, proviniendo su etimología del término latino locum tenens
Esta facultad distintiva de los Capitanes de nombrar los cargos jerárquicos intermedios entre él y su tropa, abarcaba también el nombramiento de los responsables de ciertas funciones administrativas, estando entre ellos, los cargos o empleos de Alférez, los Sargentos y los Cabos de escuadra.
De tal suerte, surge el grado de Teniente, o Lugarteniente, cuyo nombre tiene su origen en la acción de tener o aspirar el cargo o ministerio, en este caso, del Capitán, a quien incluso, accidentalmente puede reemplazar, proviniendo su etimología del término latino locum tenens
Esta facultad distintiva de los Capitanes de nombrar los cargos jerárquicos intermedios entre él y su tropa, abarcaba también el nombramiento de los responsables de ciertas funciones administrativas, estando entre ellos, los cargos o empleos de Alférez, los Sargentos y los Cabos de escuadra.
aquilifer |
En el caso del Sargento, su
origen es también confuso, aunque muchas fuentes consideran que proviene del
vocablo de raíz latina serviens, [...] hombre asalariado, asoldado, soldado,
deformado luego por el francés en el término servient o sergient, cuyo
significado está dado por el empleo de velar por las armas y los caballos del
caballero.
En cuanto al Cabo de Escuadra o Cabos de Tercios,
era quien encabezaba una Escuadra o fracción de la Compañía, pudiéndose
encontrar el origen de este término, en el mismo que el del Capitán.
Los cabos de los Tercios
Coronelias.
En el S. XVII se constituyeron cuerpos denominados Colunelas, (columnas), al mando de un Collunelo o Colonel (vocablo de origen itálico, del que deriva el nombre, utilizado para el mismo grado en las organizaciones militares italiana, inglesa y francesa y el de Coronel, en la española).
Uno de los organizadores de las
nuevas unidades fue Gonzalo de Ayora, llamado por su excelencia en la
guerra el Gran Capitán.
El oficio de cabo no es
mencionado hasta la creación de los tercios bajo la denominación de cabos de
escuadra. Este empleo surgió de la necesidad por parte de los capitanes de las
compañías de disponer de gente de confianza que garantizasen el buen orden y la
disciplina en los mil y un asuntos que, a diario, había que resolver.
De hecho,
en las patentes reales de los primeros tiempos de los tercios sólo se mencionan
a los capitanes y los cabos, siendo los alféreces y sargentos rangos surgidos a
posteriori.
El puesto de cabo de escuadra
no se alcanzaba mediante un escalafón, sino que era confiado a discreción por
el capitán de la compañía a los veteranos más fiables y que se distinguían por
su buena conducta y que igual se otorgaba que, si con el paso del tiempo no
mostraba ser merecedor del mismo, se quitaba.
Cabo de escuadra armado con espada y partesana |
En cualquier caso, había que
acreditar al menos cinco años de servicio para optar al cargo. Obviamente, todo
el que era nombrado cabo aspiraba a ir siempre un poco más allá y labrarse una
carrera provechosa en el servicio de las armas, así que su siguiente meta era
llegar a sargento, para lo cual debía permanecer al menos un año como cabo.
Cuando hizo su aparición el grado de sargento, los cabos de escuadra pasaron a
depender de estos en vez del capitán de la compañía.
Así pues, ser cabo no era un
empleo en sí mismo, sino una especie de hombre de confianza del capitán. De
hecho, su soldada era la misma que la de un piquero o un arcabucero, según
fuese cabo de unos u otros, si bien el cargo conllevaba una ventaja como ya se
mencionó en la entrada sobre los piqueros.
Como distintivo de su rango portaba
una partesana, aunque si lo estimaba oportuno utilizaba el mismo armamento que
su escuadra, ya fuese la pica, el arcabuz o el mosquete. Ejercían el mando
sobre una escuadra que, en teoría, era una cuarta parte de una compañía, o sea,
25 hombres. Sin embargo, estas escuadras estaban nutridas en la práctica por
cinco o seis, y generalmente casi nunca más de doce.
Aunque su rango era el más
ínfimo de la compañía, no por ello tenían gran importancia tanto en cuanto sus
ocupaciones eran múltiples: entrenar a su escuadra en el uso de las armas,
organizar las camaradas, cuidar del estado de policía de su gente, impedir
violencias con las mujeres o civiles en general, duelos y pendencias entre
ellos y, en definitiva y sobre todo, mantener la disciplina.
Capitán de los Tercios |
Esto último no era
moco de pavo en un ejército en el que sus componentes se daban todos aires de
grandeza, muchos eran hijosdalgo o incluso nobles (ser noble no implicaba
entrar de oficial como ocurrió después), y eran por norma muy puntillosos en lo
tocante a su honra, su honor y la opinión, no dudando en meter mano a la espada
por cualquier cosa baladí si consideraban que eso les humillaba.
Así pues, y
siendo el cabo en cierto modo un soldado más, tenía vedado castigar
directamente a su gente, teniendo que dar parte al capitán de la falta cometida
y que él decidiera o transmitiera el caso al barrachel del tercio. Obviamente,
hablamos de castigos por faltas en lo tocante a las ordenanzas ya que nadie
toleraba que fuesen por cuestiones que no concernieran a lo tocante al buen
servicio a su capitán y el rey. Como dato curioso, no se podía castigar a un
soldado con un azote, ya que eso era considerado como algo infamante, sino
golpeándolo con el plano de la espada.
Por lo general, se consideraba
que los cabos no debían estar casados, ya que ello les impediría formar
camaradas(1) con su escuadra. En los tercios se buscaba constantemente
establecer una profunda relación de camaradería entre sus miembros, y de ahí
que, siendo solteros, tuvieran más fácil el constante contacto con sus hombres.
Por otro lado, así se evitaban peligrosas tentaciones, que eso de catar hembra
ajena estaba a la orden del día y no se cortaban un pelo a la hora de poner
cuernos al mismísimo maestre de campo si se terciaba.
Acantonamiento de un Tercio |
Finalmente, debían cuidar
de la distribución de municiones, provisiones y demás bastimentos, procurando
siempre ser equitativos en el reparto. Así mismo, cuando los furrieles
repartían las boletas para pernoctar en cualquier población, procurar que su
escuadra no robase, ni cometiesen desmanes tanto en las personas como en sus
bienes. En fin, como se ve, aquello debía ser un sin vivir teniendo que lidiar
a diario con una tropa de elementos con más ínfulas que un infante de Castilla
y, en muchas ocasiones, sumamente cabreados por los sempiternos retrasos en el
cobro de sus haberes y ventajas.
A medida que pasó el tiempo
fueron surgiendo diferentes tipos de cabo en base a la función que
desempeñaban. El más significativo era el denominado cabo de guzmanes, que
mandaba la mejor escuadra de la compañía y por ello tenía una ventaja de dos
escudos al mes. Además, fueron creándose los cargos de cabo de ronda, de
presos, de gastadores, de guardia, etc., perdurando muchas de estas
denominaciones actualmente, como recordarán los que tuvimos el honor de servir
a la Patria cuando el servicio militar era obligatorio.
Nota 1. Las camaradas eran los
alojamientos para las tropas cuando estaban acantonadas. La palabra viene a querer decir compartir
cámara, y de ahí es de donde proviene el término camarada o camarada de armas
al referirse a los compañeros de unidad.
Coronelias.
En el S. XVII se constituyeron cuerpos denominados Colunelas, (columnas), al mando de un Collunelo o Colonel (vocablo de origen itálico, del que deriva el nombre, utilizado para el mismo grado en las organizaciones militares italiana, inglesa y francesa y el de Coronel, en la española).
El Gran Capitán recorriendo el campo de la Batalla de Ceriñola (Federico de Madrazo y Küntz) |
No tenía un número fijo de
capitanías, sino que se agrupaban en el comienzo de las campañas y al terminar,
se volvían a separar. De esta manera, el número no era fijo pero no excedían de
1.500 ni bajaba de 800, siendo lo normal, 1.000 hombres.
Poco tiempo después,
estas reformas, junto con las de Gonzalo Fernández de Córdoba darán lugar a la
Coronelía.
La Coronelía estaba formada por 10 "compañías" o
"batallas", de 500 hombres, divididos en 200 piqueros ordinarios, 100
arcabuceros y 200 rodeleros. Además había 2 compañías de piqueros
"extraordinarios".
Coronelía
1
Coronel
12
Capitanes
12
Alféreces
60
Cabos de batallas
600
Cabos de a diez
12
Tambores
2000
piqueros (incluyendo los cabos de a 10).
1000
piqueros extraordinarios (incluyendo los cabos de a 10)
2000
rodeleros (incluyendo los cabos de a 10)
1000
arcabuceros (incluyendo los cabos de a 10).
El
ejército se componía normalmente de 2 Coronelías (o escuadrones que también
recibía a veces este nombre), al mando de un Capitán General.
El
ejército contaba con un escuadrón de 300 jinetes ligeros y 300 hombres de armas
por Coronelía. En total un ejército estaba formado por 12.000 infantes y 1.200
jinetes.
Itegrantes de una Coronelia |
Esta
organización era la teórica, lógicamente en campaña era difícil de mantener y
tampoco era rígida.
Estas agrupaciones normalmente tenían la duración que tuviera la campaña y luego se disolvían, pero la experiencia demostraría la conveniencia de mantenerlas reunidas en forma permanente, para garantizar la integridad del país.
Con arreglo a estas
experiencias, hacia 1504 / 1505, se organizaron veinte Colunelas con un
efectivo de 800 a 1500 hombres en total, cuyos jefes recibieron la denominación
de Cabos de Colunelas. El conjunto de estas, se ponía a órdenes de un Coronel
General (por mandar la totalidad o generalidad de las colunelas).
Siempre en la idea de lograr
una mayor unidad y fuerza, en 1534, se operaron en España, importantes
reformas, particularmente en el arma de infantería.
Se organizaron unidades
denominadas Tercios, compuestas por tres coronelías, o colunelas, las que en
lugar de 20, contaron con 12 compañías de 200 hombres. Las coronelías
continuaron al mando de un coronel y la jefatura superior, la desempeñó un jefe
con el título de Maestre de Campo.
Maestre de Campo |
Así como el lugar en el que los
sargentos desempeñaban sus misiones, se denominaba Sargentía o Detall, el lugar
o local en el que el Sargento Mayor desarrollaba las suyas, se comenzó a llamar
Mayoría o Tenencia Coronela , puesto que allí se llevaban a cabo las tareas que
el Maestre de Campo, delegaba en el Sargento Mayor, de donde es fácil deducir,
que éste es el origen del grado de Teniente Coronel.
El grado de General proviene de
la misma época, en que – como ya hemos visto, surge la necesidad de poner un
mando superior, sobre la generalidad o totalidad del ejército.
De esta forma y particularmente en los ejércitos de tradición anglosajona, el cargo de General , transformado en grado, fue agregado a los ya conocidos de Teniente, Capitán, y Coronel, surgiendo así, los grados de Teniente General, Capitán General y Coronel General.
De esta forma y particularmente en los ejércitos de tradición anglosajona, el cargo de General , transformado en grado, fue agregado a los ya conocidos de Teniente, Capitán, y Coronel, surgiendo así, los grados de Teniente General, Capitán General y Coronel General.
Al mismo tiempo, y siempre en
las organizaciones militares anglosajonas, surgió la costumbre de agregar el
cargo de Mayor, a algunos grados subalternos, para diferenciar determinadas
funciones administrativas. Así, surgieron los grados de Capitán Mayor
(actualmente, Mayor) y Sargento Mayor.
Este último, como vimos, en la
organización militar hispana, era un cargo primero y luego un grado de la jerarquía de Oficiales, creado para establecer
otro intermedio entre los capitanes y los tenientes coroneles.
Del mismo modo, puede
encontrarse posteriormente entre las tradiciones y usos anglosajones, el grado
de Sargento Mayor General, cuya posterior abreviatura y transformación en Mayor
General, explica el por qué de la subordinación de éste último en aquellas, al
Teniente General.
El nombre del grado de
Mariscal, antiguamente usado en la organización española y también, en la
anglosajona, deriva de dos raíces alemanas: Marah (caballo) y Scalc (cuidador,
sirviente). De allí, que en algunos ejércitos, como el italiano, sea un grado
de la jerarquía de suboficial y paradójicamente, también, como lo explicamos
más detalladamente abajo, en los más altos grados de la jerarquía de oficiales.
En las antiguas tribus
teutónicas que invadieron al Imperio Romano, el principal sirviente de los
jefes tribales, era su “maestro de caballos”, o Marah Scalc. Cuando estos jefes
se convirtieron en reyes de los territorios conquistados, estos sirvientes,
devinieron en “oficiales de la corte” y en tiempos de guerra, en los jefes o
capitanes de la caballería.
Field Marshall |
Durante el S. XVII, en los
países anglosajones, cuando los ejércitos se convirtieron en organizaciones
permanentes del estado, la concesión de los grados constituía una prerrogativa
real, usualmente conferida mediante una comisión del rey sobre personas de
confianza o especialmente recomendadas.
Normalmente debía esperarse un
turno para obtener estas comisiones, tiempo durante el cual, se desempeñaban
grados menores dentro de las unidades, dando lugar a los llamados cargos de oficiales
no comisionados (non commissioned o fficers o NCO), cargos o grados que en la
organización militar hispánica tuvieron los llamados clases y posteriormente,
los suboficiales.
En Gran Bretaña, los grados
comisionados o cargos de oficiales podían ser vendidos, cosa que se acostumbró
hasta 1870, como una práctica sobreviviente de la época de los ejércitos
mercenarios. Solamente permanecían siendo designados, los grados del
generalato, como el resto de los grados en otros ejércitos
Durante el S. XIX, la mayoría
de los ejércitos, comenzó a aplicar el sistema de promoción o ascenso de
oficiales, mediante exámenes de suficiencia y cursos de perfeccionamiento y
entrenamiento. Quienes los superaban, inmediatamente eran distinguidos con una
garantía que los promocionaba cuando se producían vacantes en los grados
superiores.
Esto también se convirtió en costumbre, al designar como garantizados (warrant), a los oficiales no comisionados (NCO) o suboficiales más antiguos, figura que se mantiene en algunos ejércitos como el norteamericano, que designa de esta manera (warrant officers), a una jerarquía del personal militar, intermedia entre los oficiales y los suboficiales.
Esto también se convirtió en costumbre, al designar como garantizados (warrant), a los oficiales no comisionados (NCO) o suboficiales más antiguos, figura que se mantiene en algunos ejércitos como el norteamericano, que designa de esta manera (warrant officers), a una jerarquía del personal militar, intermedia entre los oficiales y los suboficiales.
Hacia principios del presente
siglo, el sistema de graduación de los oficiales, se estandarizó en la mayoría
de los ejércitos, con algunas variantes entre uno y otro país, como por
ejemplo, el grado de Mayor, que entre otros, se denomina Comandante , en el
español y en el francés, nombre con el que en nuestro ejército y en muchos
otros, se denomina a un cargo en el que se ejerce el comando, de mayor nivel que
una jefatura.
A su vez, para los grados del
generalato, el ejército francés y muchos otros, pertenecientes a países
latinos, adoptaron el patrón napoleónico, de agregar la magnitud del elemento
comandado: General de Brigada, General de División, etc.
Otras complicadas jerarquías
también fueron adoptadas por algún tiempo, por ejércitos como el ruso y otros
de países de su órbita, que luego fueron derogadas para adoptar el estilo común
ya nombrado y generalizado.
Por último, no puede omitirse
la mención del elemento esencial de cualquier ejército: el Soldado. El origen
de su nombre se puede encontrar en la baja latinidad, en el término “solidum”,
que significa sueldo o dinero y del que derivó “soldatus”, o persona asalariada.
Posteriormente, a esta palabra universal, la encontraremos dentro del antiguo
léxico militar español, acompañada de adjetivos calificativos, que le
proporcionaban a la original, una mayor jerarquía: Soldado Aventajado y Soldado
Distinguido.
Otro término de significado
semejante, será el de Muchachos, con el que conocía a los actuales Aspirantes
de nuestros institutos de reclutamiento. No podemos en esta escala jerárquica,
dejar de lado, al grado de Dragoneante. Su nombre proviene de un
antiguo verbo español (dragonear), que señala al que accidental o interinamente
ejerce funciones de un empleo superior. En nuestro Ejército, este grado lo han
llevado los Soldados Conscriptos que se distinguían por sus virtudes personales
y militares, siendo conocidos en el mismo sentido, como Cabos Conscriptos.
GRADOS EN LA POLICÍA NACIONAL DE COLOMBIA
Para hablar del origen y evolución histórica
de los grados que actualmente ostenta la
Policía Nacional de Colombia, debemos remitirnos al momento mismo de creación
de la Institución en el año de 1891, por parte del señor presidente CarlosHolguín Mallarino quien sancionó la Ley 23 de 1890 y expidió el Decreto
1000 del 5 de noviembre de 1891, sendos documentos que dieron el origen de la
Policía Nacional.
Con esta base firme, se encarga para su organización al
funcionario francés Juan María Marcelino Gilibert, quien gracias a su
experiencia, tras una ardua actividad y en corto tiempo, logra conformar el
primer cuerpo de Policía, para con fecha 15 de diciembre de 1891, convertirse
en el primer director del cuerpo de Policía.
El Decreto 1000 de 1891, se convirtió el el primer Decreto Ejecutivo sobre organización de la Policía Nacional, en virtud de los dispuesto en el artículo 1 de dicho precepto, el Ministerio de Gobierno dictó el primer Reglamento General de la Policía Nacional de Bogotá, con fecha 12 de diciembre de 1891. Este Reglamento fue publicado en folleto, en edición oficial (Imprenta Nacional), en 1910, el cual en su artículo 144 establecía:
Marcelino Gilibert, una vez asumida la Dirección
General de la Policía Nacional, procedió a dictar un reglamento, aprobado el 12
de diciembre de 1891, que rigió la organización hasta el año de 1912, cuando
fue modificado por el entonces, y nunca bien ponderado Gabriel González.
Uniforme de Gilibert, ostentando su grado en las mangas del uniforme a la altura de las manos |
El cuerpo quedaba estructurado, en tal momento por
seis divisiones, cada una de ellas con dos subdivisiones y cada subdivisión con
dos secciones.
En el reglamento se estableció que la Policía tenía
por misión la de conservar la
tranquilidad pública, protegiendo a las personas y a las propiedades, así como
salvaguardando los derechos y garantía que tanto la Carta Constitucional como
las leyes reconocían. Igualmente debía velar por el cumplimiento de la leyes
y las disposiciones emanadas de las
autoridades y prevenir la comisión de delitos y contravenciones, mediante la
efectiva aprehensión de los infractores. La Policía sería imparcial y actuaría
sin acepción de personas, salvo las inmunidades que señalaban la Constitución,
la Leyes, el derecho internacional y los tratados públicos.
Uniforme con grados utilizados durante la época de Gilibert |
Tal reglamento era, en detalle, una buena serie de
pautas de conducta, disciplina, moral y ética. Además se instruyó previamente
al personal que iniciaba sus funciones
el 1º de enero de 1892, día en el cual la Policía Nacional desfilo en Bogotá,
con uniforme similar al francés , frente al presidente Carlos Holguín y su
gabinete ministerial.
Juan María Marcelino Gilibert selecciono al personal
de la institución de manera admirable; a la Policía no tenía entrada sino
jóvenes distinguidos, de buena ilustración, que tuvieran facilidad para
interpretar a conciencia los deberes a
su cargo.
Las directivas superiores de la Policía estuvieron
integradas así: el director general, Juan María Marcelino Gilibert; el
subdirector general, coronel Pedro María Corena; secretario de ambos,
respectivamente, Antonio María Osorio y el mayor Pablo Martínez; el servicio de
correspondencia con dos escribientes; un habilitado, Camilo Caro, y como
secretario José Posada T.
Posteriormente en el año de 1896, se dictó el Decreto 10 del 21 de enero de dicho año el cual aumento la planta de personal de la Policía Nacional, pero es con el Decreto No. 230 del 8 de mayo de 1899 es que verdaderamente se organizó la Policía así:
En 1914, estando como Director de la Policía Nacional el Doctor Gabriel Gonzales Restrepo. se expide un nuevo Reglamento General de la Policía Nacional el cual estableció las siguientes jerarquías Institucionales:
características de los uniformes y sus grados
Grupo de Comandantes de la Policía durante la Dirección del Doctor Alejandro Bernate en el año de 1935.
características de los uniformes y sus grados para 1937 |
El Doctor Alejandro Bernate como Director de la Policía Nacional expidió la Resolución No. 59 del 23 de febrero de 1937, por la cual se crea la Junta Calificadora de Oficiales y Suboficiales de la Policía Nacional, cuyo texto citaba:
Paralelamente, con fecha 17 de febrero, se dicta el Decreto No.395 de 1937, firmado por el presidente Alfonso Lopez, en el cual se determinaba el orden Jerárquico en la Policía Nacional.
Para el año de 1938 se expidió un nuevo Reglamento
de Uniformes y Equipo para la Policía, fue uno de los más completos, detallado y minuciosamente
elaborado, establecido por la Dirección General, mediante Resolución 66 de 1938 y aprobado por Decreto Ejecutivo 28
de 1939. para esa fecha se encontraba con director de la Institución el señor General Alfredo Azuero Arenas.
característica de los grados según el nuevo reglamento.
Elementos complementarios de los uniformes de Policía
Decreto de ascenso a personal de la Institución, documento donde se puede observar las diferentes escalas jerárquicas existentes para el año de 1939 Grupo Directivo de la Policía Nacional Grupo de Capitanes de la Policía Nacional Grupo de Tenientes de la Policía Nacional Grupo de Subtenientes de la Policía Nacional
Para el año de 1946, mediante el Decreto No 1021 del 2 de abril, se reglamento la carrera del personal de la Policía Nacional, documento que fue firmado por el señor Alberto Lleras Camargo quien fungía como Presidente de la República para la fecha.
El estatuto de la carrera del personal uniformado trajo como innovaciones: la ampliación del escalafón hasta el grado de Comandante; los comandantes segundos que aspirasen al ascenso, fuera de los requisitos comunes, debían “presentar una tesis sobre temas que interesen a la Policía” norma que, con algunas variantes, sigue subsistiendo para varios grados de la escala jerárquica policial; estar soltero y ser bachiller para optar el grado de teniente segundo; que los tenientes segundos y primeros necesitarían para ascender la aprobación de unos “cursos de especialidades necesarios a la Policía Nacional , en establecimiento de carácter militar, técnico o universitario” , para reemplazas así los cursos de perfeccionamiento que se le había programado a la Escuela General Santander.
Con el Decreto 475 de 1946 (febrero 14) se reglamento la Ley 74, principalmente en cuanto a los siguientes aspectos: el derecho de gozar de la prima de alojamiento se reconocería mediante una resolución motivada que debía dictar la Dirección General de la Policía Nacional; exigir la condición de ser legítimos a los hijos de los funcionarios de la Policía, para que, en los casos de menores de edad, pudiesen gozar de un aumento en un 2% del sueldo devengado por la prima mensual de alojamiento; establecer el procedimiento probatorio para la filiación; señalar las causales que hacen perder el beneficio de esta prima; autorizar a la Dirección General de la Policía para investigar, breve y sumarialmente, las condiciones de vida de los favorecidos, lo cual podría dar a causar la revocatoria o reforma de la resolución que concedía aquella prestación.
Otra disposición que marca un hito prestacional y que rigió por largo tiempo, fue el Decreto 981 de 1946 (marzo 29) con el cual se reorganizó la Caja de Protección Social de la Policía Nacional, definida por el artículo 1º del mismo, como una “entidad autónoma de carácter oficial, con patrimonio propio, independiente de los bienes y fondos del Estado, a cuyo cargo está el reconocimiento y pago de las prestaciones indicadas en la Ley 74 de 1945, las que contempla el presente decreto y las adicionales que llegaren a restablecerse a favor de los empleados y obreros afiliados a la Caja.
El estatuto de la carrera del personal uniformado trajo como innovaciones: la ampliación del escalafón hasta el grado de Comandante; los comandantes segundos que aspirasen al ascenso, fuera de los requisitos comunes, debían “presentar una tesis sobre temas que interesen a la Policía” norma que, con algunas variantes, sigue subsistiendo para varios grados de la escala jerárquica policial; estar soltero y ser bachiller para optar el grado de teniente segundo; que los tenientes segundos y primeros necesitarían para ascender la aprobación de unos “cursos de especialidades necesarios a la Policía Nacional , en establecimiento de carácter militar, técnico o universitario” , para reemplazas así los cursos de perfeccionamiento que se le había programado a la Escuela General Santander.
Con el Decreto 475 de 1946 (febrero 14) se reglamento la Ley 74, principalmente en cuanto a los siguientes aspectos: el derecho de gozar de la prima de alojamiento se reconocería mediante una resolución motivada que debía dictar la Dirección General de la Policía Nacional; exigir la condición de ser legítimos a los hijos de los funcionarios de la Policía, para que, en los casos de menores de edad, pudiesen gozar de un aumento en un 2% del sueldo devengado por la prima mensual de alojamiento; establecer el procedimiento probatorio para la filiación; señalar las causales que hacen perder el beneficio de esta prima; autorizar a la Dirección General de la Policía para investigar, breve y sumarialmente, las condiciones de vida de los favorecidos, lo cual podría dar a causar la revocatoria o reforma de la resolución que concedía aquella prestación.
para el año de 1952, mediante Decreto 0645 del 3 de marzo de (siendo Presidente Roberto Urdaneta
Arbeláez por retiro del doctor Laureano Gómez, por quebrantos de salud), se expide el decreto por el cual se cambian los grados en la
Policía Nacional.
Una de las primeras preocupaciones del nuevo presidente fue restablecer la confianza de la ciudadanía en las Fuerzas Armadas y principalmente en la Policía Nacional, a la cual se sindicaba de tantos y muchas veces violentos procedimientos que lesionaban a los opositores del gobierno conservador.
Impartió instrucciones al coronel Rojas Scarpetta, entonces Director de la Policía Nacional, para que fuera proyectando la reorganización del cuerpo; designo al capitán Telmo Acevedo como director del SIC (Servicio de Inteligencia Colombiano), a petición del coronel Rojas Scarpetta, dada la gran estima y confianza que tenía en él. En su ánimo de darle a la Policía un tratamiento igualitario a las otras Fuerzas, nombró al Mayor Bernardo Echeverri Ossa como el primer edecán presidencial de la Policía Nacional.
Tanto fue el interés del presidente por darle a la Policía una imagen diferente ante el país y por terminar las rencillas muy frecuentes con otras Fuerzas Militares, que el 10 de julio de 1953, o sea, un mes antes de haberse hecho cargo de la Presidencia, dictó el Decreto 1814 mediante el cual modificó la estructura del Ministerio de Guerra, suprimió el Comando General de las Fuerzas Militares y creó en cambio el Comando General de las Fuerzas Armadas e incorporó la Policía Nacional como el cuarto componente de esas Fuerzas, integradas por el Ejército, la Marina, la Aviación y, ahora la Policía Nacional.
Este decreto sustrajo, pues, a la Policía del Ministerio de Gobierno, al cual había estado adscrita desde su fundación en 1891, con breves períodos-durante las guerras civiles de 1895 y 1898 y, por algún tiempo, en el gobierno del general Rafael reyes- en lo que, por razones de orden público, pasó transitoriamente a formar parte del Ministerio de Guerra.
La noticia fue recibida con alborozo por lo colombianos y con alivio por integrantes de la Policía Nacional. no puede olvidarse que este Cuerpo era un emparedado entre dos partidos tradicionales, usado y abusado sectariamente por el partido de turno en el gobierno para golpear al opositor. Por lo demás, los frecuentes roces por celos entre las Fuerzas Militares y la Policía, colocaban a ésta en una Capitis diminutio, (Expresión latina equivalente a "disminución de capacidad“), que la perjudicaba en su operatividad y en el tratamiento económico inferior a los sueldos y prestaciones sociales que regía en aquéllas.
Ya en condiciones de paridad, la Policía adquiría un Status de responsabilidad, pues bajo la jurisdicción militar se convertiría en una institución técnica que se libraba de las servidumbres de los políticos, aunque, infortunadamente, podría caer en el extremo de un exagerado militarismo, perjudicial para el manejo de las relaciones cívicas con el pueblo.
El Decreto 1814 fue aclarado días después por el Decreto 3220 que rezó: “Las Fuerzas Armadas están constituidas por las Fuerzas Armadas y las Fuerzas de Policía. Las Fuerzas Militares son el Ejército, la Armada y la Fuerza Aérea”.
Cabe anotar, que el posicionamiento de la Policía Nacional como una fuerza autónoma, permitió de una vez por todas determinar sus grados jerárquicos tanto para oficiales como suboficiales.
La Junta Militar y la Policía (1957-1958)
Iniciado el 10 de mayo el período de la Junta Militar e Gobierno como consecuencia de la caída del general Rojas Pinilla de la Presidencia, la Policía continuó sus actividades sin mayor alteraciones institucionales. El general Deogracias Fonseca, que antes de aquella fecha era director general de la Policía, al asumir el cargo de miembro de la Junta Militar continuó orientando los destinos de la Institución.
Poco después, el coronel del Ejército Quintín Gustavo Gómez ocupó
la Dirección de la Policía. En manos suyas el cuerpo policial sufrió otra
de sus crisis que, si bien por algunos aspectos fue bochornosa, por otros fue
motivo para que la Policía se enrumbara definitivamente por caminos más seguros
y profesionalizados, que le abrieron promisorios horizontes dentro de las
instituciones nacionales.
Un dato importancia para la Institución policial fue la gestión del Doctor Alberto Lleras Camargo, quien se
convertiría en el primer mandatario en ocupar la presidencia de la República
después del Frente Nacional, su administración se caracterizó por
acontecimientos de gran valor histórico para la Policía Nacional, toda vez, que
a través de la Ley 193 de 1959 (Reglamentada por el Decreto No. 1217 del
15/05/1962) el Gobierno Nacional dispuso que la Nación desde el 1 de enero de
1960, tendría a su cargo el sostenimiento, dotación y pago de los sueldos de la
Policía Nacional en todo el territorio de la República.
El significado de esta
Ley fue transcendental ya que estaba orientada hacia la nacionalización de la
Institución, condición indispensable de su unidad de acción y de doctrina, perdiendo valides todos las unidades
de Policía departamentales y municipales las cuales pasaron a depender a partir
de esa fecha de la Dirección General de la Policía.
Otro hecho
significativo para la Institución fue la promulgación del Decreto
0550 de 1960, por el cual
la Policía Nacional fue objeto de reformas sustanciales no solo en la
estructura orgánica sino en su direccionamiento y es por tanto que se
estableció que la Institución debería ser presidida por un Director General el
cual debía ser un Oficial de la Policía y no de otra fuerza, siendo este el
directamente responsable ante el Ministerio de Guerra del cumplimiento de las
funciones policivas en toda la nación.
Tal precepto, partió
en dos la historia Policial ya que hasta el año de 1958 el cargo de Director de
la Policía Nacional lo habían ocupado militares en actividad o en retiro, otros
políticos y civiles, especialmente abogados como el director excepcional Gabriel
González López en 1911; un presidente de
la república durante la junta militar de gobierno, el Mayor General Deogracias
Fonseca Espinosa; y finalmente, para fortuna y consolidación institucional,
policías profesionales, iniciando por el señor Teniente Coronel Saulo Gil Ramírez
Sendoya quien después de haber hecho parte de la Infantería de Marina, el Gobernador de Bolívar lo nombro como
Comandante de la Policía de ese departamento y el 1 de marzo de 1955 fue
escalafonado como oficial de la Institución en el grado de Teniente Coronel.
Teniente Coronel Saulo Gil Ramírez Sendoya, asume como nuevo Director de
la Policía Nacional el 8 de mayo de 1958.
Un aspecto importante que destacar es que el señor
Coronel Saulo Gil Ramirez Sendoya, fue el primer oficial de la Policía Nacional
en llegar a ostentar los grados de Brigadier General y Mayor General
respectivamente, ya que todos los anteriores directores habían sido
militares o en su defecto civiles.
Ascensos y uniformes para la época
CREACIÓN DE LA ACADEMIA SUPERIOR DE POLICÍA
La entidad así enunciada aparece en la
Policía Nacional como un paso de desarrollo en la formación que ha de darse en
el Alma mater a su oficialidad superior.
Es el Decreto 349 de 19 de febrero de 1965, en su articulo 2, el qué dispone “
crease la Academia Superior de Policía”. Este curso deben adelantarlo y
aprobarlo los oficiales, en el grado de mayor, de conformidad con el Estatuto
de oficiales de la Policía Nacional.
Mediante la Resolución No. 2175 de mayo
de 1964, fueron llamados por primera vez a esta academia los siguientes
mayores, sin el plan de estudios, ni los exámenes, ni las exigencias que
posteriormente se establecieron: LUIS H. VALDERRAMA NÚÑEZ, LUSI EDUARDO
HERNÁNDEZ LEÓN, JOSÉ JOAQUÍN CHACÓN HERNÁNDEZ, MARCO VINICIO PRIETO REYES, RENÉ
GORDILLO LOPERA, GERARDO ROJAS SERRANO, BERNARDO ECHEVERRI OSSA,
FILIPO VILLAREAL REVELO, MARIO ERNESTO ÁVILA MORA, CARLOS JULIO CORTÉZ GRACIA Y
FRANCISCO RODRÍGUEZ DELGADO.
Seguidamente en el año de 1965, que llega al cargo de director el señor Coronel Bernardo Camacho Leyva, primer oficial proveniente de la formación impartida en el seno de la Policía e integrante de la Primera promoción “Simón Bolívar” de la Escuela General Santander y en lo sucesivo a partir de esta fecha hasta la actualidad, este cargo ha sido desempeñado por los mandos naturales, es decir por oficiales egresados de la Escuela de Policía “General Santander”. Por lo tanto el año de 1965 se convertirá en el hito histórico la Policía Nacional.
Decreto de nombramiento
del señor Coronel Bernardo
Camacho Leyva, como Director de la
Policía Nacional
Acto protocolario de entrega del bastón de mando del señor Mayor General Saulo Gil Ramírez
Sendoya al señor Coronel Bernardo Camacho Leyva
Otra fecha importante a citar dentro de la génesis de
los grados en la Policía Nacional, se da para los
años 80´s, cuando por primera vez en la historia Institucional un señor
oficial llega a ostentar el grado de General de tres estrellas y este fue el
señor General Víctor Alberto Delgado Mallarino, Director
de la Policía Nacional durante el periodo comprendido entre los años de 1983 a
1986.
En 1985, recibió el
ascenso al grado de General, que lo convirtió en el primer General (tres
estrellas), en la historia institucional. Con casi 35 años de servicio y con
fecha 8 de agosto de 1986 se retiró del servicio activo. Por voluntad del
gobierno del entonces presidente de la República Belisario Betancur Cuartas fue
nombrado embajador extraordinario y plenipotenciario, cargo que cumplió ante
los gobiernos de Rumania y Argelia, desde 1986 hasta 1991. (primer oficial de
la Policía que fue designado en un cargo diplomático).
Oficiales Generales que conformaron los altos mandos de la Policía Nacional en los años 80´s
Seguidamente en el año de 1993, ocurre un hecho de trascendencia institucional y fue el ingreso por primera vez de un grupo de suboficiales a la Escuela de Policía “General
Santander” para hacer curso de Oficiales. Ellos integrarían la Compañía José Antonio Galán.
El 3 de diciembre de 1993, mediante Resolución No. 13876, se graduaron como oficiales, promoción "Coronel Alberto Ramírez Gómez" del curso de oficiales 065.
Nueva Carrera del Nivel Ejecutivo de la
Policía Nacional
En el año de 1993, siendo Director de la Policía Nacional el señor Mayor General Rosso José Serrano Cadena, la Institución fue objeto de una gran reforma, la cual trajo consigo la propuesta de
crear la carrera del Nivel Ejecutivo teniendo como fundamento la Ley 62 de 1993, precepto que en el numeral 1º del artículo 35, le otorgo facultades al presidente de la época el señor Cesar
Gaviria Trujillo para hacerlo; quien mediante Decreto 41 de enero 10 de 1994 desarrollo la
carrera; decreto declarado inexequible por la Corte Constitucional mediante
Sentencia No. C-417/94 del 22 de septiembre.
Con la Ley 180 de
1995 (enero 13), el Congreso de Colombia, otorgó facultades extraordinarias al
Presidente de la época Ernesto Samper Pizano, para desarrollar la Carrera
Policial denominada "Nivel Ejecutivo"; el Decreto 132 de 1995 (enero
13), desarrolló la carrera del Nivel Ejecutivo, que estableció los grados, y
los tiempos mínimos en los grados para el ascenso; este
decreto fue modificado por el Decreto 1791 de 2000, mediante facultades
otorgadas por el Congreso en la Ley 578 de 2000 al señor presidente Andrés
Pastrana Arango.
Equivalencias
y Homologación
Antes de la
instauración de la carrera del Nivel Ejecutivo, la Policía contaba con tres
carreras, de personal uniformado profesional, así: Oficiales, Suboficiales y
Agentes; el Nivel Ejecutivo se concibió con el fin de suprimir las carreras de
Suboficiales y Agentes empalmándolas en una sola carrera que contuviera a todos
sus miembros, exceptuando la carrera de Oficiales que continuaba sin
modificaciones; permitiendo al personal de Suboficiales y Agentes que lo
solicitara, el ingreso al Nivel Ejecutivo, de acuerdo con las siguientes
equivalencias:
Es de anotar, que la nueva carrera del Nivel
Ejecutivo trajo implícita la modificación de las Insignias de
los grados con relaciona a las ya existente para los Suboficiales de
la Policía Nacional y que habían sido creadas en el año de 1952, mediante el Decreto 0645 del 3 de marzo.
Por
primera vez en Colombia una mujer alcanza el grado de Brigadier General
Con
la presencia del presidente de los colombianos, Álvaro Uribe Vélez, el jefe (e)
de la Cartera de Defensa, General Freddy Padilla de León, los altos mandos de
la Institución en cabeza del Director General de la Policía Nacional, Mayor
General Óscar Adolfo Naranjo Trujillo, representantes del cuerpo diplomático,
autoridades civiles, militares y eclesiásticas, el Gobierno Nacional fue ascendida en la Institución al grado de Brigadier General, la Coronel Luz
Marina Bustos Castañeda, quien se convierte en la primera mujer en alcanzar ese
rango en Colombia.
PRIMER
GENERAL DE CUATRO ESTRELLAS EN LA POLICIA NACIONAL
Con la presencia del
Presidente de los colombianos, doctor Juan Manuel Santos Calderón, el jefe de
la Cartera de Defensa, Doctor Rodrigo Rivera Salazar, al igual que el Alto
Mando Policial, representantes del cuerpo diplomático, autoridades civiles,
militares y eclesiásticas; el Gobierno Nacional ascendió al Director
General de la Policía Nacional, Mayor General Óscar Naranjo Trujillo, al grado
de General .
Reglamento de uniformes, insignias, condecoraciones y distintivos para el personal de la
Policía Nacional (Resolución No. 3372 del 26 de octubre de 2009)
Finalmente, es importante citar que la Dirección General de
la Policía Nacional actuando de conformidad con la Ley 1405 del 28 de julio de
2010, en la que se define la jerarquía de los Oficiales, Nivel Ejecutivo,
Suboficiales y Agentes de la Policía Nacional, para efectos de mando, régimen
disciplinario, Justicia Penal Militar, lo mismo que para todos los derechos y
obligaciones, ha dispuesto modificar la Resolución 03372 del 26 de octubre de
2009, Reglamento de Uniformes, Insignias, Condecoraciones y Distintivos para el
personal de la Policía Nacional.
En este sentido y con el propósito de fortalecer la institucionalidad y alinear nuestras insignias, se hizo efectiva la homologación de los grados de los señores Oficiales Generales de la Institución con los grados de los señores Oficiales Generales y de Insignia de las Fuerzas Militares de Colombia con su respectiva antigüedad, con lo cual se fortalece la imagen corporativa, los criterios de visibilidad y diseño que permiten armonizar la uniformidad en sentido integral, constituyéndose en uno de los lineamientos más importantes a considerar en el direccionamiento institucional en los siguientes términos. |
Paginas electrónicas consultadas:
http://es.wikipedia.org/wiki/Escalaf%C3%B3n_militar_de_Colombia
http://sicer-policia.blogspot.com/2010/11/original.html
http://www.soldadosdigital.com/2009/militaria/militaria15-09-09.htm
http://razonyfuerza.mforos.com/827635/11087186-policia-nacional-de-colombia/
http://sicer-policia.blogspot.com/2010/11/original.html
http://www.soldadosdigital.com/2009/militaria/militaria15-09-09.htm
http://razonyfuerza.mforos.com/827635/11087186-policia-nacional-de-colombia/
Ante un eventual gobierno del presidente Gustavo petro es posible que los grados militares en la Policía nacional debe ser eliminados como parte de la transformación total de la Policía nacional además está institución podría ser retirado del ministerio de defensa para ser trasladado nuevamente al ministerio de interior a su vez se crea una nueva Policía nacional pero al estilo civil
ResponderBorrarEste comentario ha sido eliminado por el autor.
ResponderBorrarEn el programa de gobierno de Gustavo Petro dice
ResponderBorrarUna Policía civil para la vida y la seguridad humana.
El redimensionamiento de la Policía Nacional conforme al mandato constitucional implica que sea reubicada bajo el Ministerio de Interior o de Justicia (Alemania y Estados Unidos, son ejemplo de ello). Nuestra prioridad será recuperar, a nivel institucional y operativo, el carácter civil del cuerpo policial y de acuerdo con ello, redefinir sus funciones y prioridades, que incluyen el desmonte del Escuadrón Móvil Antidisturbios (ESMAD) y el tránsito a una fuerza orientada a la solución pacífica e inteligente de conflictos.
La reestructuración de la Policía Nacional debe contar con una amplia participación ciudadana que recoja tanto las experiencias como las propuestas, las particularidades de los territorios y la manera de enfrentar la corrupción al interior de la institución con un alto componente de veeduría ciudadana permanente en todas y cada una de sus actuaciones.
La nueva Policía garantizará la convivencia y seguridad humanas, no cumplirá funciones exclusivas de las fuerzas militares,
ni prestará servicios de escolta, o administrativos no relacionados con sus funciones constitucionales, como cargar maletas o hacer mercados.
Buenos días, cordial saludo. Soy Juan, hijo orgulloso de una intendente (r) de la Policía Nacional, enamorado de la historia y de la institución. Tengo un perfil en TikTok llamado Cangrejo Histórico y en otras redes como Instagram y Facebook, y también escribo en Wikipedia.
ResponderBorrarMe gustaría hacer uso de algunas de las imágenes de los artículos que escribes para difundir historia y mejorar artículos en Wikipedia.
Yo quería saber como puedo acceder a esas imágenes.
Si es posible por favor escríbeme al correo cangrejoenterprise@gmail.com asunto Imágenes Blogger
Un saludo cordial
Abogado Juan Dosa, Cangrejo Histórico