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jueves, 28 de noviembre de 2013

Una Historia por conocer - John F. Kennedy y su visita a Colombia





Para empezar, es muy importante remontarnos a la década de los 50ta, donde la relación entre Estados Unidos y América Latina había sido mala. De hecho, Estados Unidos había intervenido, a través de la CIA, en el derrocamiento de un gobierno en 1954. Entre el 28 abril y el 15 mayo de 1958, Nixon realizó su visita catastrófica de a América Latina, durante la cual fue mal recibido.

Richard Nixon

Este hecho fue muy importante porque le mostró a Estados Unidos que sus políticas eran tenían muy poca acogida en América Latina, y fue los que los impulsó a generar un cambio en la forma de actuar con respecto a la región.

Desde el día del regreso de Nixon a Estados Unidos, el Congreso estudió las causas del rechazo a su país, y fue entonces que se creó una reunión donde se debatió aceptar una agenda con reformas que beneficiaran a América Latina.


Más adelante, en ese mismo año, la relación comenzó a cambiar, donde el presidente de Brasil jugó un papel importante ya que al ver que  Dwight David Eisenhower  (presidente de EE.UU 1953-1961) verdaderamente quería ayudar, motivó a los demás países latinoamericanos a recibir positivamente la ayuda de Estados Unidos.

Dwight David Eisenhower
Se citó entonces una cumbre de ministros de relaciones en Washington – la cual se conoció como el Comité de los 21. En esta reunión se trataron temas de cooperación internacional, y se creó el Banco Interamericano de Desarrollo (BID). 

El 1 de enero de 1959, Castro entró triunfante a la Habana y el dictador Batista huyó hacia República Dominicana, lo que aumentó la tensión entre los países de América Latina que vieron el evento con buenos ojos y los que no. 

Castro entra triunfante a la Habana

Después, en 1960, el entonces Senador John F. Kennedy fue elegido como presidente, venciendo a su contrincante Richard Nixon.

Presidente Kennedy
Por su parte, Alberto Lleras Camargo había desempeñado durante los años cuarenta en labores en la Embajada de Colombia en Washington y también fue el primer Secretario General de la OEA. Lo anterior le permitió recoger todo tipo de conocimiento sobre de Estados Unidos, el cual le fue muy útil durante se periodo presidencial.

Alberto Lleras Camargo, secretario general de la OEA,
preside una reunión de la Organización en Washington, 1950.

La primera reunión de los 21 se dio en septiembre de 1960 en Bogotá y fue ahí que se firmó el Acta de Bogotá con la cual se sentaron las bases de la APP. En su discurso de instalación, Alberto Lleras habló de la situación de Estados Unidos, y hay que resaltar de este discurso su aproximación a los problemas del desarrollo económico y social; su preocupación por la explosión demográfica que exigía más recursos de diversa índole para atender a la población y, por consiguiente, producir más bienes y servicios para lo cual se requeriría capital, maquinaria, energía eléctrica, y recurso humano preparado, en circunstancias en las cuales los países de América Latina enfrentan una carencia de ahorro interno y externo para impulsar la inversión y la producción.

El 19 enero de 1961, 16 días después de haberse dado inicio a la Alianza, se dio la invasión de las fuerzas anticastristas en Cuba, y es entonces que Kennedy se vio obligado a hacerse responsable.


Hernando Agudelo Villa, Ministro de Hacienda y Crédito Público del Gobierno Lleras, sufrió un golpe; y a causa del mismo, Kennedy tuvo que crear una nueva y revolucionaria propuesta de apoyo al país. Esta situación creó la oportunidad para que Colombia, con Lleras en el mando, se convirtiera en el principal aliado de Estados Unidos en contra de Cuba. Colombia convocó una reunión, y el mandatario colombiano escribió un memorando a la OEA pidiendo que la organización se lo presentara a Estados Unidos en caso de que éste lo solicitara. 

Hernando Agudelo Villa, Ministro de Hacienda y Crédito Público

Dicho memorando hizo un recuento de lo ocurrido en Cuba y narra cual es la actitud de América Latina en lo que hace referencia a este suceso. Concluye diciendo que en América Latina se debe convocar a una reunión para poder dar una solución a este problema. Colombia le solicitó a Estados Unidos dejar de actuar bilateralmente en Cuba; y Estados Unidos debía controlar la situación, ante lo cual dijo: si Cuba no quiere estar en el sistema interamericano, entonces debe salirse.


Para Lleras, la prioridad de Colombia debía ser la APP y no Cuba. Más adelante, Lleras envió un segundo memorando donde ofreció una acción para promover y ampliar la consulta de estado y cualquier proposición aceptada por la OEA debía rechazar cualquier intervención unilateral en Cuba. Entre el 5 y el 17 de Agosto se reunieron los Ministros de Economía y Hacienda de los diferentes países en Uruguay y el ‘Che’ Guevara, quien asistió a esta reunión en calidad de representante del gobierno cubano, votó negativamente la Carta de Punta del Este.

El "Che" en Punta del Este

Por su lado, los demás países, votaron a favor y es entonces que se acabó la iniciativa cubana.


El 17 de agosto de 1960, Lleras y Kennedy intercambiaron cartas congratulándose por la eliminación de la amenaza cubana. 

EN QUE CONSISTÍA LA ALIANZA PARA EL PROGRESO-APP 
(inglés: Alliance for Progress).
Programa de ayuda económica, política y social de  EE.UU. Para América Latina efectuado entre 1961 y 1970.

Discurso del Presidente Kennedy  en la casa Blanca

Su origen está en la propuesta oficial del presidente John F. Kennedy, en su discurso del 13 de marzo de 1961 ante una recepción en la Casa Blanca  para los embajadores latinoamericanos.




 El discurso fue transmitido por la Voz de América  en inglés y traducido al español.

Presidente Kennedy con los embajadores latinoamericanos

La Alianza para el Progreso duraría 4 años. Se proyectó una inversión de 20.000 millones de dólares. Sus fuentes serían de los EE.UU. por medio de sus agencias de ayuda, las agencias financieras multilaterales (BID y otros) y el sector privado canalizados a través de la  Fundación Panamericana de Desarrollo.


Reunión en Uruguay

Detalles posteriores fueron elaborados y debatidos en la reunión del Consejo Interamericano Económico y Social (CIES), llamada  Conferencia de Punta del Este, que se dio del 5 al 17 de agosto de 1961 en Punta del Este (Uruguay) En dicha reunión habían delegados de todos los países miembros de la Organización de Estados Americanos (OEA), incluida Cuba (representada por Ernesto Che Guevara). En esta reunión se aprobó la creación de la Alianza para el Progreso (ALPRO); en el texto oficial de su Constitución se establece su objetivo general: "mejorar la vida de todos los habitantes del continente"; para ello se proclamaron varias medidas de carácter social (educación, sanidad, vivienda...), político (defendiendo la formación de sistemas democráticos, según el principio de autodeterminación de los pueblos) y económico (limitación de la inflación, mejora de la balanza de pagos, siempre bajo la iniciativa privada). Para garantizar estos objetivos, Estados Unidos se comprometía a cooperar en aspectos técnicos y financieros. La opinión pública recibió con entusiasmo esta declaración, pero el programa fracasó debido a que, tras el asesinato de Kennedy, sus sucesores limitaron la ayuda financiera estadounidense en América Latina, prefiriendo acuerdos bilaterales en los que primaba la cooperación militar. Cuba se opuso a firmar la carta de acuerdo final.




Conferencia de Punta del Este (Uruguay)

La negativa de Cuba no era de extrañar ya que la Alianza del Progreso se creó como una forma de contrarrestar la influencia de surevolución y apoyar solamente medidas reformistas en los demás países. El interés de EEUU era combinar la Alianza para el Progreso, El Banco Interamericano de Desarrollo (BID) y los Cuerpos de Paz, para desplegarlos por América Latina en contraposición a la revolución en Cuba. Tal era el modelo que EE.UU. veía en presidentes como Rómulo Betancour (Venezuela 1959-1964), Janio Quadros (Brasil 1961), Arturo Frondizi ( Argentina 1958-1962), Francisco José Orlich Bolmarcich (Costa Rica 1962-1966), Fernando Belaúnde Terry ( Perú 1963-1968), Eduardo Frei Moltalva (Chile 1964-1970), Alberto Lleras Camargo (Colombia 1958-1962) y Guillermo León Valencia (Colombia 1962-1966). 



Presidente de Colombia Alberto Lleras Camargo


Las principales medidas eran una reforma agraria en función de mejorar la productividad agrícola, libre comercio entre los países latinoamericanos, modernización de la infraestructura de comunicaciones, reforma de los sistemas de impuestos, acceso a la vivienda, mejorar las condiciones sanitarias para elevar la expectativa de vida, mejora en el acceso a la educación y erradicación del analfabetismo, precios estables y control de la inflación y cooperación monetaria.

Inicialmente dentro de la OEA el CIES era el encargado de coordinar la ayuda financiera, revisión de los planes y proyectos de la Alianza remitidos por los países. Sin embargo la creciente complejidad hace ingobernable los propósitos de la Carta de Punta del Este. En la reunión de Cancilleres de Río de Janeiro (noviembre de 1963), y tomando como base los informes de Kubitschek y Lleras Camargo, se crea el Comité Interamericano de la Alianza para el Progreso (CIAP 1963-1970) como el organismo rector del programa de ayuda, dependiendo del Comité Ejecutivo del CIES.

A mediados de diciembre, Kennedy realizó una gira por América Latina durante la cual intentó “vender el evangelio de la Alianza para el Progreso”, y durante la cual visitó países como Colombia, Puerto Rico y Venezuela, antes de asistir nuevamente a otra reunión en Punta del Este. La razón por la cual Kennedy visitó Bogotá fue por petición directa de Lleras. En ese momento de la historia, los recursos de la Alianza estaban financiando la construcción de ciudad Techo en Bogotá, que más tarde se convertiría en Ciudad Kennedy, y donde el presidente estadounidense asistió a la inauguración. Durante la reunión, se acordó que no se usaría la palabra “sanciones”, por petición de Colombia, ya que podría ser mal recibida en América Latina. Estados Unidos se comprometió a entablar diálogo con Brasil y con Chile. 

Llegada de Kennedy al aeropuerto el Dorado de la ciudad de Bogotá



Así mismo, Colombia hizo énfasis en que la relación de Cuba con China Soviética no debía ser utilizada como una razón para romper relaciones. Finalmente, Cuba fue expulsada de la OEA luego de la reunión que se realizó en Uruguay. La expulsión tuvo como justificación que las ideas de Cuba no eran compatibles con las de los demás países y la votación para la expulsión fue de 14 votos a favor y 1 en contra.

Es entonces queda la pregunta: ¿y de la Alianza qué? En un artículo publicado en el 63 -un mes antes de la muerte de Kennedy, Lleras defendió el acuerdo de Punta del Este el cual implicaba cambios positivos en términos de progreso para Colombia. En ese momento la reforma era muy mal recibida por la población.

Los intereses y las presiones que Lleras denunció en el 63 terminaron por dar al traste con la APP. A eso se sumó el cambio de gobierno en Colombia en 1962, cuando el Lleras dejó el poder, y también se sumó el asesinato de Kennedy a finales de 1963.





FOTOGRAFÍAS DE LA VISITA DEL PRESIDENTE JOHN F. KENNEDY A LA CIUDAD DE BOGOTÁ.


Kennedy al aeropuerto el Dorado de la ciudad de Bogotá
En la fotografía muestra el momento en que el presidente Kennedy, su esposa y el presidente Alberto Lleras Camargo escuchaban las notas del Himno Nacional en el Aeropuerto el Dorado.




Caravana Presidencial por las Principales calles de la ciudad de Bogotá


Recibimiento del Presidente Kennedy en  el lugar de construcción de ciudad Techo en Bogotá









Palabras del señor Presidente Alberto Lleras Camargo, durante la ceremonia de inicio de construcción de la ciudad de Techo en Bogotá  la cual posteriormente se denominaría Ciudad Kennedy 







Intervención del Señor Presidente de Estados Unidos John F. Kennedy



Diciembre de 1961: John F. Kennedy inaugura el proyecto habitacional de "Ciudad Techo" junto al presidente colombiano Alberto Lleras.


En la fotografía se observa al fondo  la valla con el plano de la obra de la ciudad de Techo

El presidente de Estados Unidos John Fitzgerald Kennedy y el presidente de Colombia Alberto Llera Camargo en Colombia, 1961. En la placa se exalta la Alianza para el Progreso.



Despedida del señor Presidente John Kennedy de la ciudad de Bogotá
Sello postal conmemorativo a la visita de Kennedy a Colombia
Las imágenes de los sellos que aparecen en este blog están tomadas de http://colnect.com/es/stamps/countries


Fuente: Fotografias tomadas de la pagina Web del John F. Kenney Presidential Library and Musuem



 EFICIENTE MISIÓN CUMPLIDA POR LA POLICÍA NACIONAL DURANTE LA VISITA DEL PRESIDENTE JOHN F. KENNEDY A LA CIUDAD DE BOGOTÁ.


El servicio de seguridad personal para el señor presidente Kennedy y su señora esposa fue organizado por el Capitán Mario Castillo Ruiz de la Policía Nacional y por señor Stewart Stout, agente especial del Servicio Secreto del Departamento del Tesoro de las Estados Unidos.

Fotografía del señor Capitán Mario Castillo Ruiz de la Policía Nacional, organizador de la seguridad personal del presidente Kennedy y sus esposa Jacqueline
El grupo organizado por el Gobierno Colombiano para responder por al vida y seguridad del mandatario norteamericano y su esposa quedo constituido así:

De la Policía Nacional los siguientes Oficiales:

Capitanes Mario Castillo Ruiz, Enrique Medina, Fernando Domínguez, Enrique Larrota, Enrique Gallego, Enrique Valderrama y el Teniente Luis Fernando Ospina.
Además:
Cinco agentes del DAS
Tres agentes del Palacio Presidencial
Trece agentes del Servicio Secreto Norteamericano.
Todos los oficiales de la Policía Nacional a quienes se le encomendó esta misión dominaban perfectamente el idioma ingles.

La responsabilidad de este grupo de oficiales consistió en hacer sugerencias previas a la llegada del señor presidente, recibirlo en el aeropuerto, dirigir y controlar el desfile de automotores del Dorado a Techo, de Techo al Palacio Presidencial y luego del palacio presidencial nuevamente a el Dorado lo mismo que la visita de la señora Jacqueline al Hospital Infantil.

El control de los 500 invitados a la recepción en el palacio de San Carlos, el de todos los empleados contratados para estos servicios, como meseros, músicos etc.

El señor Presidente Kennedy y su señora esposa se despidieron personalmente de los Oficiales de la Policía Nacional a quienes felicitaron, encomendando al señor capitán Castillo transmitiera su voz de agradecimiento a todos los que hicieron parte de su grupo de seguridad personal y la de su señora esposa.


Este personal no uso pistolas Parabellum, sino el clásico revólver policial 38 Special.

Un dato importante para resaltar fueron las declaraciones del Inspector del servicio Secreto del Departamento del Tesoro, quien manifestó que las medidas tomadas por la Policía nacional, las Fuerzas Militares, el DAS y el grupo de seguridad organizado por el Capitán Castillo Ruiz, no solo cumplía las más elementales normas de seguridad sino que lo calificó “como el mejor servicio organizado por país alguno durante los 25 años que él estaba prestando esta clase de servicios














ARGENIL PLAZAS, EL COLOMBIANO PROTEGIDO POR KENNEDY
Nota de Santiago Gómez Lema (Redactor El Tiempo)
Se cumplen 50 años de la muerte del expresidente, quien en 1961 hizo una visita especial a Bogotá.
El hombre de 96 años que descansa sobre la camilla –ha escapado varias veces de la muerte– tiene un pasado insólito: fue buscador de oro, pionero del cine en el Tolima, agricultor, desplazado, padre de 17 hijos con la misma mujer y cofundador de una de las localidades más grandes de Bogotá.
Pero un recuerdo se impone. El 16 de diciembre de 1961, el día en que estrechó la mano del expresidente John F. Kennedy, Argenil Plazas tenía 46 años. Desde ese día, la capital tendría un crecimiento sorprendente. Su familia, también.


John F. Kennedy, Argenil Plazas, de espaldas, junto a su esposa y su hijo.
Foto: Archivo particular


El primer ladrillo que se pegó en el territorio antiguamente poblado por los muiscas, hoy localidad de Kennedy, lo fijó Argenil junto al mandatario y su esposa Jacqueline, en 1961. Esa iba a ser su casa, la primera casa de la localidad ocho de Bogotá. “Se la dieron porque era el más vaciado de todos y el que más familia tenía”, cuenta un hijo suyo que lleva el mismo nombre.

Todo era parte de la Alianza para el Progreso, un programa de ayuda social del gobierno de Estados Uniddos para los paises subdesarrollados en Latinoamerica.

Este mes, cuando se cumplen los 50 años de la muerte de Kennedy, Argemil invoca su propia teoría conspirativa sobre el asesinato. Es inocente pero no deja de ser conmovedora: dice que lo mataron porque quería que todos los países del sur, con el tiempo, gozaran de la misma prosperidad de Estados Unidos. Y eso, por supuesto, no convenía.

Desde entonces el barrial desagradable donde solo se veía el aeropuerto de Techo se fue transformando en una masa de ladrillo enorme que hoy por hoy supera en población (cerca de un 1’300.000 habitantes) a muchos países europeos.

Ambos presidentes, Alberto Lleras Camargo y John F. Kennedy, le dieron la escritura a Argenil. “Si yo hubiera tenido plata pa’ pagarla de contado, me habría costado 11.125 pesos. Pero como me tocó sacarla fiada”, solía decir cuando todavía podía conversar con fluidez.

“Vivo ahora en la casa con mis trece hijos. Y somos felices por habernos liberado de la pobreza y no vivir más como unos parias”, escribe en la primera carta que le envió al presidente Kennedy.

Gustavo Plazas, el mayor de los 17 hijos, relata la historia desde el inicio. Las cosas comenzaron, como casi todo en este país, con la violencia bipartidista. Argenil era el único liberal –liberal a muerte, enfatiza– de Santa Isabel, Tolima. Fue perseguido sin tregua.

Las amenazas se radicalizaron con el incendio causado por los chulavitas (los conservadores) que carbonizó el único teatro del pueblo. “Mi papá fue el primero en proyectar películas de Cantinflas, de Pedro Infante, de Jorge Negrete”, anota el mayor, un sastre de 71 años.

En la huida, Gustavo recuerda estupefacto la noche fría que pasaron refugiados tras una piedra enorme, al lado de un río. Su papá les contaba historias de reinos inexistentes a sus 12 hijos para espantar el miedo de la oscuridad.

Más adelante, de camino a la capital, la esposa de Argenil, que estaba embarazada, dio a luz a su hijo número 13 bajo de una mata de café.

Argenil habría de recordar aquel agrio recorrido hacia el exilio el día en que conoció la Casa Blanca por invitación directa del expresidente Kennedy. Un mes vivió bajo el deslumbramiento que producen los grandes hombres. El lujo, la cordialidad, las ideas altruistas marcarían su nueva búsqueda. La de ser un personaje ejemplar en su propio barrio.






En el Aerocóndor que lo llevaría por primera vez lejos de Bogotá, Argenil repasaba, tarea perdida de antemano, un panfleto con las palabras básicas de un idioma que nunca aprendería a hablar: inglés.

La memoria de Kennedy

Unos meses después, el 22 de noviembre de 1963, en la casa de tres plantas que exhibe la placa conmemorativa que confirma que allí empezó toda la historia de esta localidad –la cual lleva hoy el nombre popular de ‘la 4.ª ciudad más grande de Colombia’–, Argenil escuchó por la radio que habían matado a su protector. El llanto llegó fácil, sin remedio. Pero tardó poco.

Hoy la antigua casa que se alzó sobre el terreno baldío de aquellos tiempos guarda las memorias de los buenos tiempos. Fotos, artículos, llaves, cartas cruzadas, documentos.



Sus hijos planean convertir la casa de Argenil en un museo. “Acá llegan cada rato franceses y norteamericanos persiguiendo los recuerdos del expresidente”, concluye John Francisco Plazas, que carga, por voluntad de su padre, con las mismas iniciales del exmandatario.






VISITA A LA TUMBA DE KENNEDY EN EL ARLINGTON NATIONAL CEMENTERY

Con motivo del viaje de referenciación otorgado por la Policía Nacional de Colombia para el personal de Suboficiales y Mandos Ejecutivos que estuviesen haciendo curso en la Escuela de Suboficiales “Gonzalo Jiménez de Quesada” para ascenso al máximo grado de esta escala jerárquica (Sargentos Mayores y Comisarios), tuve el grato placer de visitar y conocer el  ARLINGTON NATIONAL CEMENTERY , ubicado en la ciudad de Washington D.C., donde se encuentra la tumba del presidente John F. Kennedy. Kennedy  está enterrado junto a su esposa y algunos de sus hijos. Su tumba tiene una "llama eterna". Muy cerca de ahí está enterrado su hermano, el senador Robert F. Kennedy y ahora, recientemente está enterrado su otro hermano, el senador Edward M. Kennedy.






Cabe destacar que es un cementerio militar estadounidense establecido durante la Guerra de Secesión en los terrenos de Robert E. Lee. Está situado cerca del Río Potomac, en las proximidades de El Pentágono.



Veteranos de todas las guerras están enterrados en este cementerio, desde la Guerra de Independencia de los Estados Unidos hasta las acciones militares en Afganistán e Irak.



Es curioso que estando dicho cementerio reservado a los militares y a aquellos que prestaron valiosos servicios militares a su país en distintas guerras, esté allí enterrado el ex presidente William Howard Taft, quien nunca fue militar.

El Memorial del transbordador espacial Challenger está dedicado a la memoria de la tripulación del vuelo STS-51-L que el 28 de enero de 1986 murió durante el lanzamiento de su nave. Aunque la mayoría de los restos fueron identificados y devueltos a sus familiares para un funeral privado, en Arlington se enterraron los restos que no se pudieron identificar. Además, dos miembros de la tripulación, Francis Scobee y Michael Smithestán enterrados en este cementerio. Hay un memorial muy similar dedicado a la tripulación que falleció durante el accidente del Transbordador Columbia el 1 de febrero de 2003.



Otro de los memoriales del cementerio está dedicado a las víctimas del ataque terrorista del 11 de septiembre al Pentágono. El memorial incluye el nombre de los 184 desaparecidos. Existe otro memorial a las 259 personas que perdieron la vida en el vuelo de la Pan Am 103 en Lockerbie, Escocia. El avión estalló por una bomba colocada en su interior. 180 de estas víctimas eran estadounidenses.


Tumba de los desconocidos

La Tumba de los desconocidos (también conocida como la Tumba de los soldados desconocidos, aunque nunca ha sido nombrada oficialmente) es un monumento en el Cementerio de Arlington en los Estados Unidos dedicado a los militares estadounidenses que murieron y cuyos restos no pudieron ser identificados. Los "soldados desconocidos" de la Primera Guerra Mundial es un nombramiento similar a la Medalla de Honor, la Cruz Victoria, y muchos otros grandes premios de otras naciones. Los soldados desconocidos estadounidenses que fueron enterrados posteriormente también se consideran como ganadores de la Medalla de Honor, otorgada por el Presidente de Estados Unidos que presidió su funeral.






La visita a este majestuoso cementerio, me hizo recordar que en Bogotá Colombia también tenemos el “Cementerio Central” donde al igual que el de “Arlington” está lleno de  mucha historia toda vez que en ellos reposan los restos mortales de esos seres que en vida la forjaron.

A Dios y a la Policía Nacional doy gracias por tan hermosa experiencia.


FOTOGRAFÍAS DE LA TUMBA DE KENNEDY
















"LA RAZA HUMANA DEBE PONER FIN A LA GUERRA, O SERÁ LA GUERRA LA QUE PONGA FIN A LA RAZA HUMAN"

John F. Kennedy